Bienestar

Pequeños problemas, un gran problema

pequenos-problemas-un-gran-problemaAyer, como tantos argentinos y amantes del fútbol de otros países, estuve muy pendiente durante 90 minutos viendo por TV al club del que soy simpatizante desde niña (River Plate), ya que se jugaba su permanencia en primera A o su pase a primera B. 

Mientras sufría con los vaivenes del partido, me di cuenta de que se pudo haber evitado llegar a esa instancia límite, de haber tenido presente que una serie de pequeños problemitas, con el tiempo, al ir sumándose, degeneran en uno grande y, muchas veces, insalvable.

Con respecto al partido, obviamente, los disgustos no comenzaron ayer. Al no tomarse las medidas necesarias oportunamente, se llegó a este extremo. Y el esfuerzo de último momento no sirvió para salvar al equipo del descenso.

Esto es aplicable a todos los órdenes de la vida. Cuántas veces querríamos modificar el rumbo de alguna situación y nos damos cuenta de que es tarde, de que lo que tenemos que abarcar es demasiado grande, difícil, engorroso, que se nos va de las manos, que nos excede, que no sabemos adónde o a quién recurrir o que, simplemente, ya no tiene solución.

En la mayoría de las ocasiones, es mucho lo que podemos hacer para evitar que las cosas nos superen. Cuántas veces te habrás preguntado, ¿por qué no hice esto o aquello a tiempo? ¿Cómo no lo noté? ¿Por qué me dejé estar?

Te propongo que minimices la posibilidad de que pequeños problemas se transformen en uno muy grande y dificultoso. Y que en vez de preocuparte, te ocupes de manera proactiva. Para ello:

  • Cuando te pase algo, enfréntalo. En el orden que sea. Busca la solución apenas puedas, no pienses que por no hacer nada, lo que está mal o es difícil se solucionará por sí solo. Si, por ejemplo, tienes una gotera en el baño, trata de arreglarla (si sabes hacerlo) o pide ayuda capacitada. Tratar de disimularla solo hará que, con el correr de los días, eso empeore.
  • Cuando tengas una molestia de salud, ve al médico. Uno sabe distinguir entre un pequeño resfriado y uno que no se va con el correr de los días. Muchos de los trastornos serios de la salud son por haber desoído los primeros indicios o síntomas que nuestro cuerpo nos ha dado.
  • Si hay una situación gris con tu pareja o con alguien cercano (familiar, amigo, compañero de trabajo), aborda el tema de la manera que puedas, cuanto antes. En especial si has tenido sentimientos negativos en más de una ocasión o si te has encontrado resentido y cada vez más desilusionado con esa persona. Las peleas irreconciliables, por lo general, son por estallar luego de haberse quedado callado durante demasiado tiempo.

¿Eres de las personas que intentan buscar soluciones a los problemas de inmediato o te dejas estar?

Escrito por: Merlina Meiler

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