Soñar es una cuestión bioquímica, que todos las personas hemos experimentado. La recreación de realidades paralelas, el repaso de experiencias de nuestro pasado y nuestro futuro, la proyección de escenarios que denotan la conciencia más allá de la persona, son algunas de las características de la práctica onírica.
Aquí algunos beneficios de soñar.
- Procesamiento de nueva información y memoria
Según el investigador Robert Stickgold, los sueños contribuyen a la consolidación de la memoria y el aprendizaje, son uno de los principales recursos de los que nuestra mente dispone para integrar y procesar nueva información.
- Autoterapia
El sueño ayuda a disipar el estrés. Asociamos los sueños a sentimientos que ya se han experimentado previamente, trabajando con emociones relacionadas.
- Nos preparan para eventos drásticos
La teoría de la estimulación de amenazas de Antti Revonsuo afirma que los sueños proyectan escenarios amenazantes para que cuando una persona los enfrenta en “la vida real” de algún modo esté familiarizado con las sensaciones que estos escenarios le imponen, lo cual se traduce en una reacción mucho más acertada frente a estos eventos.
- Resolución de problemas con creatividad
Al soñar podemos encontrar respuesta o solución a problemas que nos aquejan.
- Nos preparan para los cambios
El investigador Mohkamsing-den Boer estudió a tribus indígenas de Surinam y confirmó que utilizan los sueños como preparativo para tomar decisiones complejas, así como para familiarizarse con cambios importantes en sus vidas como la muerte de un ser querido.