En nuestra sociedad la búsqueda por el peso ideal se ha convertido en una de las principales preocupaciones de hombres y mujeres. Y si bien, algunos desean perder peso sentirse más saludables; la principal motivación parece ser casi siempre la estética. Queremos lucir de acuerdo a los estándares de belleza que nos han impuesto y esta aspiración, puede resultar más dañina que benéfica.
Recientemente se ha hecho una mayor consciencia de la necesidad de aceptar la belleza propia. Se han difundido campañas para hacer notar que mucho de lo que vemos en las revistas, está muy distorsionado y alejado de la realidad. Sin embargo, es un problema que no sólo se trata de lo físico, sino también de lo emocional.
La salud, en el sentido más pleno de la palabra, no se refiere únicamente a no estar enfermos; se trata de sentirse bien física, mental y emocionalmente. Es por eso que es clave la aceptación de nuestro propio cuerpo. Esto no quiere decir que si tenemos sobrepeso no hagamos nada al respecto porque “nos aceptamos”, sino que cuidemos nuestra salud y aspiremos a lograr un peso saludable, pero siendo conscientes de nuestro cuerpo.
Aprender a amar nuestro cuerpo es clave para estar bien en mente y cuerpo. Nuestra mente influye en nuestro peso, así lo señalan diversos estudios. Entre estos, un estudio de la Florida State University College of Medicine, en el que se encontró que las personas con mayor ansiedad y menos seguridad sobre su cuerpo, son más propensas a comer de forma emocional y obsesionarse con dietas que a la larga perjudican su salud.
Es necesario tener una imagen propia saludable, tener mayor consciencia de nuestro cuerpo, impulsar nuestra autoestima y sentirnos a gusto con nosotros mismos. Esto, sumado a una alimentación balanceada, hacer ejercicio y tomar suficiente agua, nos ayudará a que alcancemos nuestro peso ideal de forma más sana y definitiva.
Escrito por: Elena Pedrozo
