Es muy común que en la actualidad tanto la mamá como el papá deban salir a trabajar, a veces por necesidad económica, y otras simplemente porque ambos tienen las mismas intenciones de realizarse profesionalmente. Entonces surge la preocupación acerca de quién va a cuidar al bebé ¿Guardería o niñera?
Cuando el bebé es muy pequeño, a veces es preferible que lo cuide una niñera. Claro que debes buscar una que tenga referencias comprobables, que sea muy confiable y que esté dispuesta a realizar las tareas imitando las rutinas de los padres.
Las ventajas de tener una niñera en casa son:
- Prevención de enfermedades infecto contagiosas.
- Atención personalizada.
- Ambiente familiar (el bebé se siente a gusto en su hogar).
- Abundancia de recursos en caso de necesitarlos (ropa, juguetes del bebé, alimentos, cremas, etc.).
Pero, también hay desventajas:
- La niñera es una sola con el bebé. Si se enferma o tiene un imprevisto, estarás en un aprieto para encontrar sustituta.
- Si tienes que cambiarla, el bebé podría verse afectado por lo repentino del cambio, pues tienen modos y hábitos distintos.
Cuando el bebé tiene más de 18 meses, la guardería resulta más beneficiosa, porque en ese ámbito es estimulada la socialización, además de la expresión artística, corporal y la percepción. Para elegir guardería debes considerar si tiene las condiciones higiénicas y criterios educativos y recreativos adecuados.
Una vez tomada la decisión, es importante que la familia se mantenga firme, ya que hay un periodo de adaptación que en algunos niños puede ser bastante difícil. Sólo si el bebé sigue llorando durante un tiempo prolongado, o si manifiesta señales de angustia, falta de apetito, o temor excesivo, deben preocuparse e investigar las causas, realizar una consulta con el pediatra y una entrevista con la docente.
Cada familia elige quien cuide a su bebé, lo importante es obtener la seguridad, la atención y la estimulación adecuada.
Escrito por: Marian Mastro
