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El xoloitzcuintli de Dolores

el-xoloitzcuintli-de-DoloresEste perro fue famoso entre los pintores Frida Kalho, Diego Rivera, Alfaro Siqueiros, que pertenecieron al movimiento muralista, donde se tocaban y cuestionaban los temas mexicanos.

Un perro sin cabello, gris, de tamaño mediano y flaco. Para muchos es una excentricidad, para otros es un asco. El asunto es que este perro tiene más de mil años, y en algún momento estuvo en peligro de extinción. Su término proviene de xolotl que conlleva a varios significados, pero todos relacionados a la misma raíz etimológica. Xólotl en sí es un dios que comúnmente era asociado con figuras monstruosas, también significando el término "monstruo", itzcuintle, que significa perro.

Esta particular escultura del xoloitzcuitli se encuentra en Museo Dolores Olmedo, quien fue una mujer con historia e importancia. Nació el 14 de diciembre de 1908 en Tacubaya, Ciudad de México. Era la mayor de los hijos del matrimonio formado por la maestra normalista María Patiño Suárez y Manuel Olmedo Mayagoitia, un profesionista que trabajaba como contador y abogado en algunos de los establecimientos de la Ciudad de México. Después de la muerte de su padre en 1914, su madre se dedicó a sacar adelante a la familia. Como era maestra comenzó a dar clases a los niños en su casa.

Dolores Olmedo sintió una gran admiración por su madre. Esto fue determinante en su vida, ya que fue feminista en acción y apoyó el papel de la mujer como parte fundamental de la sociedad.

Más tarde, Dolores sería filántropa y coleccionista de arte. Se casó con Howard S. Philips, quien la introdujo al círculo cultural del momento donde se encontraban, Carlos Pellicer, Salvador Novo, Jorge Cuesta, Javier Villarrutia, Jaime Torres Bodet, entre otros. Aunque años más tarde dejaría su matrimonio, éste fue de vital importancia para su impulso.

En los cuarenta, cuando conoció a Bernardo Quintana, se asoció con él para fundar una fábrica de ladrillos llamada Industria Cerámica Armada (ICA), y en 1948 se convirtió en gerente de CICSA (Compañía Inmobiliaria y Constructora). Así entró al ámbito empresarial; en aquel tiempo pocas mujeres tenían acceso a estos negocios.

Dolores no sólo fue una empresaria, también se preocupó por fomentar las actividades culturas. Después de varios años de haber roto amistad con Diego Rivera, la reanudaron. Diego ya estaba condenado a muerte por un cáncer, y Dolores le ayudó a que regresara de la Unión Soviética, donde había recibido las radiaciones. De esta manera se convirtió en una de las diez a las cuales Diego le legó parte de sus bienes. Antes de morir se firmó la carta de fideicomiso, donde quedó como presidenta Dolores Olmedo, por lo que le cedió todos los derechos autorales de sus obras, textos, y documentos con el fin de exhibirlas al pueblo de México.

En 1962 adquirió "La Noria" en Xochimilco y en 1988 creó la Fundación Dolores Olmedo Patiño A.C, para dejar sus obras reunidas al pueblo mexicano, de 145 pinturas de Diego Rivera, 25 de Frida Kahlo, 42 de Angelina Beloff, más de 600 piezas prehispánicas reconocidas y registradas por el Instituto Nacional de Antropología e Historia, varios santos estofados del siglo XVIII, la colección de arte popular, 4 mil libros de la Biblioteca, pavo reales, guajolotes, patos, perros xoloitzcuintles y un jardín ecológico con más de 25 variedades de plantas y árboles mexicanos. Dolores Olmedo falleció el 27 de julio de 2002 en su casa de Xochimilco.

Así encontrarán esta escultura, la cual podrán ver en el jardín del museo, como un homenaje particular a lo que este perro significó en esta época: el auge de la cultura mexicana, que esta generación se inclinó a expresar mediante el arte y su promoción.

Escrito por: Haydeé Ramos Cadena

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