Sin lugar a dudas, los problemas de dinero están en la raíz de un número importante de crisis matrimoniales. De hecho, según la mayoría de las fuentes, este asunto está considerado dentro de las 4 causas más comunes de divorcio - compartiendo escenario con artistas de la infidelidad, la comunicación y el abuso emocional. Y por lo general, el enfoque dominante para superar este dilema ha sido un tratamiento superficial con base en los siguientes consejos:
- Ponerse de acuerdo sobre un presupuesto
- Establecer objetivos
- Comunicarse
- Tener cuentas bancarias separadas
Ahora, yo no negaría la posibilidad de que estas recomendaciones de sentido común podrían ser útiles cuando se trata de parejas en conflicto por el dinero. La mayoría de los problemas matrimoniales no son más que un síntoma de un problema mucho mayor subyacente. Por ejemplo la infidelidad. La razón por la que la mayoría de las personas engaña a su pareja es la pérdida de una conexión emocional causada por miedos, inseguridades y baja autoestima.
Otro ejemplo sería la falta de comunicación. Las personas no se comunican con su pareja, como resultado de su crítica, argumentativa, asfixiante, o una necesidad de control. Simple y llanamente no quiere estar cerca de ese comportamiento. Posteriormente, cuando la cartera se hace un poco más ligera o no hay suficiente dinero en el banco para pagar las cuentas a causa de una mala economía, la situación puede ser exacerbada.
Sin embargo, dos
socios que están en una relación sólida y no luchando con miedos y creencias autolimitantes por lo general superan los tiempos difíciles. ¿Tú estás luchando con miedos e inseguridades? ¿Te siente celosa o sientes que puedes perder el control de tu relación cuando tu pareja gasta el dinero sólo para sí mismo? O, ¿te sientes menospreciada porque tu pareja no pasa suficiente tiempo contigo o no te da la atención que deseas? Tal vez él tiene miedo al abandono o a perder el control. En pocas palabras, por lo general hay un problema subyacente que causa que la mayoría de las parejas lleguen a tener conflictos por el dinero. Sin embargo, existe una excepción a la regla - la compra compulsiva o la conducta adictiva.
En conclusión, si deseas eliminar las disputas financieras en tu relación, debes corregir los miedos y las inseguridades subyacentes. Para librarse de una mala hierba mala emocional, no sólo debes podar las hojas, sino llegar hasta la raíz del problema.
Escrito por: V Coach
