Diversas actividades, desarrolladas sobre todo desde casa, son una gran oportunidad para alcanzar este objetivo. El manejo de las nuevas tecnologías de la información, los empleos de medio tiempo, ventas o el teletrabajo son opciones cada vez más atractivas.
Si se desea ganar un dinero extra, que complemente los ingresos principales, la prudencia y la sensatez son tus mejores aliados. Algunas propuestas para conseguir ingresos complementarios son las siguientes:
Trabajos part-time: trabajar a tiempo parcial, por horas, es una opción laboral en aumento en momentos de crisis, si bien para evitar situaciones de riesgo conviene formalizar un contrato.
Colaborar en Internet: en algunas redes, blogs o bitácoras (redWeblogs, Wordpress o Blogspot), se paga por artículo o post. Es conveniente recabar información a través de los foros para conocer su seriedad y fiabilidad. También se pueden hacer colaboraciones en encuestas de opinión, lecturas de cadenas de correos, el registro en páginas web u ofertas, que proponen diversas tarifas. Son las páginas PTC (pagos por clic) o PTR (pagos por leer).
Publicidad en Internet: se puede crear un portal sobre un tema interesante que alcance un número significativo de visitas, algo que permitirá insertar publicidad de pago y generará ingresos relevantes. Lo idóneo es contactar con una empresa que desee promocionarse, cuyos contenidos encajen con los de la web.
Labor de comercial: son empleos parciales, pero lo importante en ellos es la capacidad de persuasión y de venta del trabajador. Las ganancias dependen del éxito comercial. Destacan las ventas por catálogo o multinivel.
Impartir clases: en función del nivel académico y de la disponibilidad, puede ser una opción muy recomendable. Los idiomas, las matemáticas o la informática tienen una gran demanda. No obstante, para llevar a cabo esta actividad de forma legal, ya sea en la propia casa o a domicilio, habría que darse de alta como autónomo y calcular la rentabilidad con los gastos que esto implica.
Venta de objetos: poner a la venta objetos de segunda mano que ya no se utilizan, o que resultan superfluos, es hoy en día mucho más factible gracias a los numerosos portales de artículos de segunda mano o subasta. Se puede vender tanto en Internet como en comercios especializados.
Alquiler: si se dispone de espacio suficiente, se puede alquilar una habitación que no se ocupe. Precisa la cesión de cierta intimidad, así como de espacios comunes. Otra opción sería arrendar una plaza de garaje o un vehículo comercial.
Cocinar a domicilio: cocinar para terceros es un buen negocio y no requiere salir de casa para explotarlo. Lo más sencillo es iniciar la actividad con redes propias de clientes, con contactos personales. Además, se puede insertar publicidad en Internet o en diarios y revistas.
Fuente: www.consumer.es