Los pequeños detalles hacen una gran diferencia y eso aplica en cualquier aspecto de nuestra vida. Para darle a tu casa ese toque único no necesitas gastar mucho o hacer grandes transformaciones, con pequeños detalles puedes imprimir tu sello por todos los rincones de la casa y darle un aire de renovación.
Más allá de los colores o la disposición de los muebles, son los detalles los que pueden realzar una habitación y darle personalidad; brindan esa sensación de hogar, la llenan de vida y la hacen distinta de otras habitaciones. Algo tan pequeño como una lámpara puede dar el toque exótico o clásico que buscas, he aquí algunas ideas a considerar:
- Las fotografías dan una buena atmósfera a la habitación. Si fueron tomadas por ti, brindan un toque único y un mayor sentido de pertenencia.
- Las artesanías son un buen detalle para la decoración del hogar; proporcionan ese sentido de espacio único y acogedor.
- Las plantas brindan vida y color al espacio. Si no tienes problemas para cuidarlas, un par de flores pueden ser el toque que necesitas.
- Las cortinas, sábanas, fundas, alfombras y demás, son una excelente oportunidad de experimentar con tu creatividad; consigue telas que te permitan expresar tu sello en tu hogar.
- Una buena idea para los espacios pequeños es colocar un espejo que brinden una sensación de mayor espacio.
- Equilibrio y armonía son elementos clave de la decoración. No sólo se trata de cómo lucen, sino de la sensación que nos brindan; cuando una habitación está equilibrada se puede sentir la paz.
- La iluminación también es clave; unas cortinas blancas en cuartos más iluminados o agregar una lámpara no solo brindarán más luz, sino más amplitud al espacio.
Nuestra casa habla de nosotros, más allá de nuestros gustos o el orden que tengamos. Decorar un espacio es hacerlo nuestro, es una extensión de nosotros mismos que nos brinda comodidad y tranquilidad. Visualizar el tipo de espacio que deseamos hará más fácil la búsqueda de esos pequeños detalles que nos ayuden a poner nuestro sello y renovar nuestro hogar.
Escrito por: Elena Pedrozo
