Bienestar

Información para la pareja de un enfermo adicto

para la pareja de un adicto

 

Por: Regina Kuri

La enfermedad de la adicción no es sólo de quien la padece sino de todo su sistema familiar y personas alrededor. La dinámica de convivencia consiste en conductas obsesivo compulsivas por las dos partes, del adicto a las drogas por consumirlas, y de las personas cercanas por tratar de controlar al adicto o consumidor.

He hablado antes de las conductas facilitadoras a las cuales recurren las personas o familiares que están alrededor de una persona adicta. Estas conductas no son a propósito ni con la intención de perjudicar al adicto o adicta, muy por el contrario se busca ayudarlo; sin embargo se tiene una falsa concepción de la ayuda. Lejos de ayudarlo lo que se quiere lograr es controlarlo con la idea de que no se haga más daño o no caiga en acciones que lo puedan perjudicar más como serían robar o tener algún accidente, que se vaya de la casa o cualquier otra. La realidad es que en muchos casos desgraciadamente el enfermo adicto cae en situaciones que están muy lejos de poderse controlar.

Los mecanismos de defensa impiden percibir que no sólo la persona adicta es la que necesita ayuda, sino también la pareja. El cuestionamiento común, acompañado de mucho enojo es ¿por qué se droga? O ¿por qué se hace tanto daño? La verdad es que lejos de que se pueda controlar, la mejor manera de ayudar es resolviendo la problemática propia. Es decir, en el caso de que sea la pareja el cuestionamiento ideal sería: ¿por qué estoy con una persona que se hace daño y me hace daño? o ¿por qué me afecta tanto que se drogue?

Muchas veces los codependientes no se mueven o toman acción porque esperan que su pareja con problemas de adicción deje de consumir, creen que sus problemas terminarían si su pareja se dejara de drogar, sin embargo las medidas que toman para ayudar a que eso suceda no son las más efectivas. El tratar de protegerlo con acciones como darle dinero, curarle las crudas, mentir para que no lo despidan del trabajo, entre innumerables más le hace la vida más fácil lo cual impide que viva las consecuencias de sus actos. Es complicado puesto que es una enfermedad y eso hace que los demás de alguna manera se compadezcan, pero también existe una falta de responsabilidad por querer cambiar, la rehabilitación es posible para todos aunque algunos creen que no, empezando por los codependientes.

Otra pregunta muy común es: ¿Por qué tendría yo que hacer algo al respecto cuándo yo no soy el/la que se droga? Lo primero que yo le sugiero a la pareja de un enfermo adicto es que se informe, que busque ayuda acudiendo a una terapia especialista en adicciones y codependencia o a un grupo de ayuda mutua. Debe aprender a ponerse límites pero sobre todo entender que la adicción es una enfermedad y necesita atenderse pero que no es su decisión hacerlo, sino de su pareja. En el caso de que el enfermo adicto no quiera ayuda, la pareja deberá buscar la ayuda necesaria si es que no quiere seguir haciéndose daño en su relación.

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*