Si acostumbras pasar por un refresco o un jugo frío para calmar tu sed estos días en que el calor está insoportable, te dejamos unas palabras de precaución: estas bebidas aumentan la presión arterial y el riesgo de diabetes si son consumidas por un largo periodo de tiempo (los meses de primavera y verano son suficientes).
De acuerdo a un estudio publicado por la universidad de Harvard, el consumir este tipo de bebidas todos los días no le hace ningún favor a tu cuerpo. Además de que te hace subir de peso sin que lo notes, contienen grandes cantidades de azúcar y sodio, y muy pocos nutrientes.
Además, está demostrado que las personas que acostumbran consumir este tipo de bebidas con más frecuencia, tienden a llevar un estilo de vida poco saludable y una dieta muy pobre en nutrientes.
Lo ideal para refrescarse es el agua natural, ya que hidrata al 100% sin calorías ni otros aditivos. Si no te gusta simple, puedes añadirle jugo de fruta natural. Así podrás refrescarte a cualquier hora a la vez que ayudas a tu cuerpo a desechar toxinas y podrás bajar de peso con mayor facilidad.
Escrito por: Nahiely Aquino