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ás de lo mismo. Y más de lo peor. La clase política hace justamente lo necesario para seguir cavando el hoyo. Del Presidente – quien se dice que estudio economía- a lo empresarios pasando por los priístas, no hay uno que logre apuntar el tema en el sentido correcto: El asunto no es gravar la producción sino el consumo. Así lo hacen todos los países competitivos del mundo. Cómo vamos a competir con otros países si al costo de una licuadora mexicana le tenemos que sumar 30% de ISR, más toda una bola de otros impuestos, cuando esa misma máquina llega a México con 10% de ISR, o menos.cuando hacemos que los productos mexicanos sean más caros por tanto impuesto como el ISR, entonces estamos favoreciendo a los productores de otros países que pagan menos impuesto
como lo hacen ellos no nos queda más que igualar sistemas. No castiguemos la producción mexicana, mejor gravemos el consumo, sea de productos mexicanos o chinos. Y es que cuando hacemos que los productos mexicanos sean más caros por tanto impuesto como el ISR, entonces estamos favoreciendo a los productores de otros países que pagan menos impuesto sobre la renta.
Además, al generalizar el IVA se aumenta la base de contribuyentes pues es un impuesto muy noble por su fácil fiscalización. Lo que México neceista es bajar el ISR, gravar el consumo - más a los ricos, a los pobres menos-. Pero paguemos todos para incentivar el empleo, la formalidad y, por lo tanto, los ingresos públicos.
No es posible que sólo 5 millones de mexicanos paguemos impuestos y que se nos siga cargando la mano. Que paguen todos.
Este país ya no aguanta que se sigan haciendo las cosas exactamente al revés. Está probado, entre menos impuestos se le pongan a los negocios, más negocios se abren y expanden.