¿Quién de nosotras no ha recurrido a los remedios de la abuela para algún malestar? El uso de hierbas medicinales para tratar diversas enfermedades es una tradición milenaria ya que sociedades ancestrales de egipcios, griegos, indios, romanos, aztecas y chinos, la utilizaban como la medicina tradicional que tenemos en la actualidad.
Hipócrates fue conocido como el Padre de la Medicina Moderna en el 460-375 a.C., él mencionó la existencia de 300 a 400 plantas medicinales, creía que el cuerpo humano era autocurativo, por lo tanto con una mínima ayuda de drogas y una dieta adecuada se recuperaba. En esa época ésta era una idea revolucionaria; fue notable también por ser la primera figura en medicina que no asociaba la magia o la demonología con los beneficios curativos de las hierbas, lo que le valió el título del padre de la medicina científica.
Esta alternativa medica remonta sus inicios a la época prehistórica, convirtiéndola así en una de las formas más extendidas de medicina, que cuenta con presencia en todas las culturas del mundo. Los científicos farmacéuticos de la actualidad se han basado en los conocimientos tradicionales para lograr la síntesis y elaboración de fármacos, siendo un procedimiento que sigue hoy en día, descubriendo constantemente nuevas aplicaciones.
La preparación o administración de una planta medicinal, debe ir acompañada de estrictos cuidados, esto con la finalidad de optimizar los efectos curativos y efectivos de la preparación. Debes aprender que realizar extractos con plantas procesadas te permitirá obtener mejores benéficos. Su administración puede ser a través de las siguientes formas: aceites, cocción, compresas, ensaladas y extractos.
Algunas de las hierbas medicinales más usadas por sus efectos positivos son:
- Manzanilla: una infusión de té, servirá para lavar los ojos cuando existe alguna infección, puede funcionar como desinfectante, antiséptico, decolorante o enjuague de cabello.
- Yerba buena: una infusión de té, alivia malestar estomacal.
- Ruda: una ramita en el oído quita el aire y dolor, en infusión de alcohol desinflama.
- Flor de azahar: su infusión de té tranquiliza y sirve para dormir.
- Pasiflora: en infusión de té, ayuda a calmar los nervios y provoca sueño.
- Hojas de naranjo, mandarino o limón: como infusiones de té sirven como vitamina "C", también son tés digestivos.
- Anís: es un té digestivo.
- Orégano: infusión de té, sirve para el resfriado, también como condimento en ensaladas y calma los cólicos menstruales.
- Canela: en una infusión de té, sirve para el resfriado y reduce el dolor en cólicos menstruales.
- Hojas de Eucalipto: una infusión de té, ayudará descongestionar vías respiratorias a través de inhalaciones del vapor, no se bebe.
- Epazote: Si lo picas y comes en ayunas, actuará como un desparasitante.
- Perejil y Apio: infusiones de té diuréticas.
- Jamaica: en infusión de té aliviará las úlceras estomacales, es diurética, y una buena base para agua fresca.
- Menta: quita el mal aliento, cuando es masticada.
- Chaya: estabiliza los niveles de azúcar en las personas diabéticas, a través de pequeñas dosis en infusión de té.
Como puedes ver las hierbas medicinales nos traen diferentes beneficios, es valido optar por alternativas curativas naturales, pero si el malestar persiste después de un par de remedios, es importante que asistas con algún experto. Si vives en DF o Estado de México, puedes ubicar el más cercano a ti a través del Directorio SuperMujer.