Son muchas las razones por las cuales un niño puede tener dificultades de aprendizaje, por ejemplo la dislexia o alguna dificultad para escribir; sin embargo hay una causa que suele pasar desapercibida ya que comunmente se confunde con falta de atención o concentración del pequeño: la hipoacusia o pérdida auditiva.
El oído es un sentido que jamás se interrumpe, ni siquiera cuando dormimos, el 75% de la información que recibe nuestro cerebro entra a través del oído. La audición es la vía común para adquirir el lenguaje hablado y una pérdida en esta área tiene como consecuencia trastornos de la voz y dificultades en el uso del lenguaje, lo que conlleva a un retraso en el aprendizaje, así como secuelas psicológicas que pueden afectar el carácter y las relaciones interpersonales del niño.
Detección temprana, la clave para un desarrollo óptimo
Lo más importante es la detección temprana para poder encontrar una solución adecuada cuanto antes, y asegurar que el niño desarrolle el lenguaje correctamente y se adapte al ritmo de enseñanza con mayor facilidad.
Adriana Martínez, Audiología, Otoneuróloga y Foniatra de Electro Audición Avanzada, distribuidor de MED-EL en México, explica: “Los padres y los maestros deben estar atentos al desempeño del niño dentro del aula y es esencial que sepan reconocer los indicios que un niño muestra cuando tiene dificultad para escuchar correctamente.”
Señales de que un niño tiene dificultades para escuchar:
- No responde cuando se lo llama o se le pide algo
- Tiene problemas para distinguir de dónde viene el sonido
- Requiere que se le repitan las indicaciones frecuentemente
- No cumple órdenes o malinterpreta las instrucciones
- En la producción oral o escrita, modifica frecuentemente alguna letra o palabra
- Al dar una orden, observa que habitualmente actúa imitando a sus compañeros
- Pregunta ¿Qué? con frecuencia
- Nota diferencia en la comprensión de consignas en los diferentes entornos (silencioso o ruidoso)
Si la respuesta a alguna de estas preguntas es “sí” o ante cualquier otra duda sobre el desarrollo auditivo o lingüístico del niño, es recomendable consultar a un otorrinolaringólogo.
Pérdida auditiva, ¿Cuáles son las opciones?
La pérdida auditiva suele ser aterradora para los padres, sin embargo es importante informarse muy bien sobre el tema y buscar el diagnóstico de un especialista que pueda ofrecer la mejor solución para ayudar al pequeño. En muchos casos, la deteccción y correción temprana de la pérdida auditiva en el niño ayuda a que éste sea capaz de desarrollar el lenguaje a la par de sus compañeros cuya capacidad auditiva está intacta.
Hoy en día, existen múltiples soluciones que pueden ayudar a niños con hipoacusia, dependiendo del tipo y grado de la pérdida auditiva: audífonos, implantes cocleares, los implantes de conducción ósea, los implantes de oído medio e implantes de estimulación electroacústica.
“La elección del tratamiento dependerá de muchos factores, lo importante es lograr un diagnóstico temprano para que el niño pueda comenzar a estimular al máximo su capacidad auditiva. Así se garantiza una óptima preservación auditiva que será clave para lograr los mejores resultados, con un impacto directo en el desarrollo cognitivo, en su capacidad de aprendizaje y sobre todo en su calidad de vida.”, concluyó Adriana Martínez,
Con información de MED-EL*
*MED-EL, con sede principal en Innsbruck (Austria) y 29 oficinas distribuidas por todo el mundo, es un proveedor internacional líder en sistemas de implantes auditivos; cuentan con la gama de productos más amplia del mundo en el sector de soluciones implantables para el tratamiento de los distintos tipos de pérdidas de audición. Hoy en día, los pacientes de más de 100 países en todo el mundo pueden oír gracias a los productos de MED-EL.
www.medel.com/esl.
