Para estar saludables es necesario dormir entre siete y nueve horas, así lo señalan los especialistas. Dormir nos ayuda a mantener nuestro cuerpo sano y nuestra mente en forma para un óptimo funcionamiento. Mientras que una noche sin sueño nos hará sentir desorientados, irritables, faltos de concentración y con malestar, pero además de estos efectos, existen consecuencias que una prolongada falta de sueño pueden provocar en nosotros:
Favorece la obesidad. No dormir lo suficiente altera la producción de grelina y leptina, hormonas que controlan el apetito, lo que puede provocar que comamos de más.
Aumenta el riesgo de diabetes. Dormir mal aumenta la resistencia a la insulina, es decir, afecta la capacidad del organismo para procesar la glucosa; lo que puede provocar su aumento en la sangre y favorecer del desarrollo de la diabetes.
Mayor depresión y ansiedad. Se ha visto que las personas que duermen menos son más propensas a trastornos emocionales. Según algunos estudios esto podría deberse a afecciones en el cerebro en las zonas responsables de las emociones debido a la falta de sueño.
Problemas de memoria. Una de las funciones del sueño es organizar y almacenar la información obtenida durante el día, por lo que no dormir lo suficiente puede tener consecuencias en nuestra memoria y en nuestra capacidad para adquirir nuevos conocimientos. Algunos estudios señalan que también podría aumentar el riesgo de pérdida de memoria al envejecer.
Aumenta el riesgo de ataques cardiacos. Las posibilidades de sufrir un ataque cardiaco aumentan cuando no se tienen las suficientes horas de sueño. Según un estudio, las personas que duermen menos de 6 horas tienen un riesgo 48% de sufrir un ataque cardiaco o desarrollar una enfermedad del corazón.
Otras consecuencias. No dormir lo suficiente podría además provocar problemas en los huesos, problemas gastrointestinales, envejecimiento precoz, afectar el sistema inmunológico, problemas respiratorios, disminución de la creatividad y capacidad para encontrar soluciones a problemas, entre otros.
Tener una buena noche de sueño es tan importante como el ejercicio o una dieta balanceada para mantenernos en un buen estado de salud. Así que ya lo sabes, programa tu cita con la almohada para que cubras tus ocho horas diarias.
Escrito por: Elena Pedrozo