Hola, hoy traigo estos cupcakes que los que me seguís por twitter ya los habíais visto. Últimamente me ha dado por este pequeño monstruito, ya que no sólo hice estos cupcakes si no también un amigurumi gigante. Yo como estoy en plan sanote he hecho estos cupcakes más sanos, que no son como comerse una manzana, pero que aportan mucha fibra 😉
Y es que están hechos con harina integral, con avena también, azúcar moreno en lugar de azúcar blanco, y con aceite en lugar de mantequilla o margarina. El bizcocho resulta muy muy rico, si sois muy dulzones os recomiendo aumentar la cantidad de azúcar, quizá 50 gramos más estaría bien, aunque a mí me gusta tal cual. No resulta un bizcocho súper jugoso, quizá un poco seco, pero al llevar la nata por encima hace una combinación estupenda, yo no le cambiaría nada 🙂
Ingredientes (12 cupcakes aprox.):
• 160gr harina integral
• 40gr copos de avena
• 100gr azúcar moreno
• 2 huevos
• 1 cucharada de cacao puro en polvo
• 1/2 cucharadita de levadura
• 1/2 cucharadita de bicarbonato
• 50ml aceite de oliva
• 100ml leche
• 200ml nata
• 2 cucharadas de azúcar
• 1 cucharadita de cuajada en polvo*
• Colorante azul
*Esto lo utilizo para que la nata quede más dura y no se baje con el paso de las horas. Normalmente utilizo leche en polvo, si tenéis, añadid una o dos cucharadas de leche en polvo, o si tenéis gelatina en polvo pues también, una cucharadita de gelatina.
Preparación:
Ponemos los huevos en un bol con el azúcar, batimos hasta que blanqueen un poco (no hace falta que doblen el volumen).
A continuación añadimos la avena, el bicarbonato, la levadura y el cacao. Batimos hasta integrar todo. Añadimos el aceite y batimos de nuevo.
Ahora añadimos la harina y la leche alternándolas y batiendo entre cada adición (harina, batir, leche, batir, harina, batir…)
Una vez que tenemos la masa lista la echamos en nuestras cápsulas (y éstas dentro de algún molde rígido, yo utilizo las flaneras desechables que venden en los “chinos”). Y llevamos al horno a 180º (precalentado) durante unos 15 minutos. Al pinchar con una brocheta ésta debe salir sin restos de masa líquida.
Una vez están hechos los sacamos y los dejamos enfriar sobre una rejilla (sin las flaneras).
Para la cobertura, ponemos la nata bien fría en un bol, le añadimos el azúcar y la cuajada y batimos con las varillas eléctricas hasta que forme picos fuertes. Cuando esté bien montada le añadimos el colorante y removemos con una lengua de gato con cuidado de no bajar la nata, añadimos colorante hasta conseguir el color que más nos guste. Ponemos la nata en una manga pastelera y reservamos en la nevera. Por cierto, yo no los decoré todos, decoré unos 7, si los vais a decorar todos haced el doble de cantidad de cobertura.
Montaje de los monstruos:
Lo normal sería utilizar una boquilla de hierba para hacer el pelo del monstruo… pero yo no tengo, así que utilicé una boquilla de estrella muy pequeña, no sabría deciros número…. pero vamos, una boquilla que haga forma de estrella (de cuatro puntas, sin más) y que sea pequeña, sobre todo si los cupcakes, como los míos, no son muy grandes.
Para los ojos he utilizado las bolas blancas de chocolate y cereal que venden en tiendas de gominola, y la pupila con unas gotas de chocolate que había hecho hace tiempo, pero aquí cada uno puede poner lo que más le guste o tenga a mano. Y en la boca, cómo no, una buena cookie, en este caso he utilizado las mini chips ahoy (o como se escriba… XD).
Y la decoración no tiene mucha ciencia. Empezamos por la copa del cupcake (no salen lisos, salen con barriguita, la necesitaremos si no queremos poner medio kilo de nata en cada cupcake), en el centro de la barriga del cupcake y hacia abajo, empezamos haciendo como onditas, una en la cima, y vamos bajando con otra, y otra, y así hasta llegar a la base, seguimos haciendo lo mismo justo al lado de donde hemos comenzado. Así es como lo hice yo, pero claro está que cada uno puede hacer el pelo de monstruo como más le guste o más cómodo le parezca, en cuestión de pelos de monstruo no hay nada escrito 😛
Recordad empezar a decorar los cupcakes cuando éstos estén completamente fríos, y decoradlos poco antes de comerlos a poder ser, luego siempre debemos guardarlos en la nevera.
Escrito por: Yolanda Iglesias
Fuente: Magdalenasdechocolate.blogspot
