Todo lo que hacemos, lo que decimos, lo que vestimos, lo que comemos, absolutamente todo, habla de nosotros. Aun sin darnos cuenta, reflejamos en cosas tan simples como lo que compramos, quienes somos y nuestra visión del mundo. No se trata sólo de la ropa, todas nuestras decisiones de compra están ligadas a quienes somos y la visión que tenemos de nosotros mismos (y lo que queremos transmitir)
Cuando se trata de comprar, nuestro cerebro lleva a cabo un diálogo que toma lugar antes de que nos demos cuenta y nos lleva a elegir un producto sobre otro. Nuestras memorias, nuestro estado de ánimo, las cosas que nos han dicho nuestros amigos, todos esos antecedentes, serán el filtro para elegir un producto que no sólo cumpla con las características que necesitamos, sino que concuerde con nuestra visión del mundo.
¿Qué tiene que ver un refresco con quien soy yo? Más de lo que crees. Si ese refresco ha logrado transmitirte una actitud positiva, logrará más que sólo quitarte la sed. Pero no es porque los publicistas hayan logrado implantarte esa idea, sino porque lo que te han presentado concuerda con tu visión del mundo y entonces lo adoptas. Las marcas que logran crear un vínculo profundo con sus consumidores, han logrado adquirir clientes leales que difícilmente los cambiarán. Los comerciales buscan hacernos sentir identificados con la marca a través de esas cosas que nos resultan familiares.
Vivimos en un mundo de gran incertidumbre, las cosas cambian rápidamente y no estamos muy seguros de cómo deberíamos vivir. En este mundo las marcas han cobrado relevancia en nuestra definición de nosotros mismos, es un personaje con el que nos identificamos y reflejamos lo que somos o queremos ser. Elegimos aquello que nos resulta familiar.
El anuncio nos da las claves y nosotros hacemos la historia en torno a la marca a partir de experiencias previas. Construimos nuestra visión de la marca, pero también a nosotros a partir de ella. Una marca que te brinda los elementos para hacer una historia con la que te sientes identificada, es más probable que logre entablar un vínculo profundo contigo, pues aunque no te des cuenta, se siente bien elegir cierta marca porque de alguna forma “se parece a ti”.
