¿Dónde está papá? ¿Por qué no tengo mamá? Estas preguntas tan inocentes son uno de los dilemas más dolorosos para las madres y padres solteros. Es difícil decidir entre la verdad completa y la verdad a medias, pero hay algunas consideraciones que debes tomar en cuenta antes de elegir tu respuesta.
En realidad, no hay una explicación que resuelva del todo estas preguntas sobre el padre o madre ausente. Lo más probable es que el asunto resurja en diferentes etapas de la infancia, ya que la repetición es algo que conforta a los pequeños. Además, el conflicto emocional que resulta no es algo que se pueda solucionar con una sola charla.
Puntos importantes para hablar del padre ausente
Yo sugeriría que hagas una lista de todos los puntos que quieres explicarle a tu hijo sobre el asunto, de manera que tengas claras tus ideas y elijas las palabras más adecuadas con anticipación.
En esta explicación es importante que incluyas un aspecto primordial: el razonamiento que hizo que el padre ausente decidiera no involucrarse con ustedes. Por ejemplo: “Era muy joven y no se sentía listo para ser padre”, “Vivíamos muy lejos”, o “Necesitaba tiempo para resolver sus conflictos”, etc.
Lo que importa aquí no es justificar su decisión, sino hacerle entender a tu hijo que ésta no tuvo nada que ver con él o ella, que no es culpa suya en ningún sentido. Si no dejas esto claro pude tener muy graves consecuencias en la autoestima de tu hijo, a corto y largo plazo.
Tampoco debes irte al extremo de hacerlo ver como el malo de la película, ya que estar en contra o tener sentimientos negativos hacia el padre ausente puede ser tan malo como la culpa. Además, podrías estar cerrando la puerta a un futuro acercamiento entre él y tu hijo.
Atesora recuerdos
Finalmente, es importante que compartas con tu hijo cualquier recuerdo positivo que tengas de el padre ausente. Así tendrá más elementos para formarse una imagen de esa persona, y que serán de gran importancia cuando esté tratando de definirse como individuo en la etapa adolescente. Cuando se pregunte ¿cómo me parezco a papá? tendrá más información para responderse y no sólo la idea de que tiene un padre que lo abandonó.
Y no olvides que cualquier conversación que tengas al respecto debe estar llena de amor y comprensión. No puedes cambiar el hecho de que el padre no está, pero le puedes recordar que tú sí lo estás, incondicionalmente.
Escrito por: Jennifer Wolf