E
l calostro, conocido con el nombre de"oro", es un líquido amarillento espeso que aparece los tres primeros días después del parto y contiene una gran cantidad de proteínas, minerales, sodio, potasio, vitaminas A y E, carotenoides, carbohidratos, grasa, lactosa y además es rico en secreciones de IgA (una inmunoglobulina importante y agente para prevenir infecciones).El calostro tiene en su interior toda la información genética del sistema inmune de la madre, siendo imprescindible para aportar al bebé recién nacido la protección necesaria en las primeras semanas
Dentro del calostro materno se encuentran los factores de transferencia que son unas pequeñas moléculas mensajeras inmunológicas que ayudan a educar a las células inmunes de los bebés para que se activen y esten alerta ante un posible peligro.
El recién nacido necesita durante las primeras 48 horas muy poca cantidad de calostro, por lo tanto lo que la mama producirá será suficiente. No hay que preocuparse si sólo salen gotas, generalmente el bebé se alimenta del calostro hasta las 48 o 72 horas postparto, momento, en el cual, comenzará la producción de leche madura.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda a los países subdesarrollados que prolonguenla lactancia materna hasta los nueve meses, pues se ha comprobado que los bebés están más protegidos contra las infecciones, tales como la varicela, sarampión, difteria, otitis y faringitis, entre las principales.
Curiosamente, si el bebé es prematuro, el calostro tiene aún más potencial para prevenir las infecciones. Es especialmente importante que los bebés prematuros reciban el calostro producido por la madre, según los especialistas.
Los bebés que encuentran "oro" durante la primera semana, son recompenzados con un tesoro para toda su vida. No hay nada mejor que el calostro, para un comienzo sano...
Fuente: Instituto Mexicano del Seguro Social y Club Parenting