Escrito por Psic. Adriana Barroso
En esta ocasión quiero compartir con ustedes las etapas del desarrollo psicosocial elaboradas por Erik Erikson. Conocerlas es muy útil tanto a nivel personal como en nuestro papel de padres o bien como profesores. Algunas veces pareciera que no entendemos por qué actuamos del tal cual forma o por qué nos sentimos de algún modo en especial. Pudiera ser que al conocer esta teoría tengamos un poco más de luz para entendernos y comprendernos. Les sugiero que al ir leyendo cada una de las primeras etapas recuerden cómo fue su niñez y al llegar a los últimas vean si están logrando vivir las etapas que les corresponden de una forma sana y positivamente, consiguiendo la virtud a lograr; o bien, si no lo están consiguiendo tengan la oportunidad de reflexionar sobre lo que deben trabajar, si así lo desean.
Esta teoría, del mismo modo, nos puede ayudar para saber qué tal vamos con la crianza de nuestros hijos, siempre recordando que no hay padres perfectos pues algunas veces el querer ser perfecto nos puede llevar a vivir con tanta ansiedad que conseguimos exactamente lo inverso a lo deseado.
Primera etapa. Confianza frente a desconfianza.
Va del nacimiento al primer año de vida. El bebé aprende a confiar en el mundo si ha tenido los cuidados propicios de parte de su madre. Si logra con éxito esta etapa logrará tener esperanza y confianza en el mundo que lo rodea. De lo contrario se sentirá inseguro y ansioso.
Segunda etapa. Autonomía contra verguenza y duda.
Va de los dos a los tres años. El niño empieza a explorar el mundo y a adquirir cierta independencia, si se le apoya adecuadamente con firmeza, tolerancia y límites apropiados podrá conseguir autodeterminación y voluntad en su vida.
Tercera etapa. Iniciativa frente a culpa.
Va de los tres a los siete años. Los niños empiezan a generar ideas sobre juegos, actividades, experimentos, manualidades que habrá que alentar apropiadamente para que puedan ser capaces de dirigir, en su vida adulta, sin pasar por encima de los demás. Si no se logra preferirán ser pasivos y seguir a los demás.
Cuarta etapa. Industriosidad frente a inferioridad.
Va de los seis o siete años hasta la pubertad. Los niños buscan sentirse orgullosos de sus logros y terminar sus proyectos. Padres, profesores y maestros deberán alentarlos a desarrollar sus capacidades para que desarrollen seguridad en ellas y puedan desenvolverse adecuadamente al sentirse aptos.
Quinta etapa. Identidad frente a confusión de papeles.
Corresponde a la adolescencia. El adolescente está en busca de su identidad, quién es y qué papel juega en la sociedad. Si no culmina esta etapa con éxito pasará a la adultez confundido sobre lo que quiere hacer en la vida y qué papel tiene en el mundo.
Sexta etapa. Intimidad frente a aislamiento.
Aquí se encuentra la adultez temprana. Digamos que va de los veinte a los veinticinco o treinta años. Se exploran relaciones más cercanas que pueden implicar un compromiso más serio. Si se rehúye a este acercamiento las personas tenderán a vivir aisladas. Al pasarla con éxito encontraremos a la persona con la cual queramos comprometernos; de lo contrario, puede ser que vivamos muy
abiertos y tengamos muchas relaciones o demasiado cerrados y excluyamos a los demás.
Séptima etapa. Generatividad frente a estancamiento.
Corresponde a la adultez media. Va de los veinticinco o treinta años hasta los sesenta aproximadamente. Es la etapa productiva de la vida; las personas que se sienten útiles en su casa, comunidad y trabajo se sienten satisfechas con sus logros, habilidades y actividades, por lo que disfrutan de ellas; de lo contrario sentirán que el tiempo pasa y envejecen sin estar viviendo realmente o estar haciendo algo que valga la pena.
Octava etapa. Integridad del yo frente a desesperación.
De los sesenta años en adelante. En este periodo se llega a la jubilación; si hemos tenido una vida satisfactoria podremos integrarnos en nuestros logros; de otro modo, se experimentará culpa por el tiempo desperdiciado lo que lleva a vivir la
vejez en depresión.
Espero, que este bosquejo de la teoría de Erikson les haya ayudado a reflexionar sobre sus vivencias y recuerden que siempre se está a tiempo de dar un cambio para mejorar si sentimos que estamos estancados en algún punto.
Psic. Adriana Barroso
