El problema de la obesidad en los niños se está convirtiendo en un problema real y que no afecta sólo a algunos, sino que a muchos, tal es así que la Organización Mundial de la Salud (OMS), hace unos días, ha declarado la obesidad infantil un problema de salud pública.
Según muchos estudios los niños con sobrepeso serán potenciales adultos con sobrepeso y además pueden desarrollar una serie de problemas de salud, como la diabetes o enfermedades cardiovasculares.
De acuerdo a un estudio presentado en Barcelona durante el congreso de la Sociedad Europea de cardiología, el 50 por ciento de niños con sobrepeso podría ya estar sufriendo daños arteriales parecidos a los de la arteroesclerosis. Esto, debido al gran consumo de grasa y calorías que los niños consumen hoy en día y que muchos padres no controlan.
Son los padres los que deben fomentar los buenos hábitos en la alimentación del pequeño, proporcionarles una dieta que contenga los elementos esenciales para que el niño crezca sano y fuerte. Carnes, verduras, frutas y de vez en cuando algún dulce o chocolate no están mal siempre y cuando se fomente el deporte y las actividades físicas que ayuden al pequeño a crecer fuerte y sano.