Escrito por Marta Vázquez Reina
Intercambio de libros de texto.Esta fórmula de trueque permite abaratar el gasto de las familias en material educativo
"Yo te doy y tú me das". El trueque ha sido siempre un método óptimo para adquirir bienes o servicios sin tener que incurrir en ningún gasto. Con este procedimiento, asociaciones de padres de alumnos y administraciones educativas promueven cada año programas voluntarios de intercambio de libros de texto en los centros educativos para minimizar la inversión en material didáctico que deben afrontar las familias al comienzo del curso escolar. Los alumnos ceden los libros que ya no van a utilizar y obtienen otros que necesitarán el siguiente año académico.
Una fórmula opcional para todos los estudiantes que no pueden acceder a estas ayudas es el intercambio entre alumnos. ¿Quién no ha utilizado alguna vez los libros que pertenecieron a hermanos o amigos de otros cursos? A menudo, las editoriales no varían el contenido de los libros o los cambios son insignificantes, por lo que la reutilización del material de un curso para otro es factible.
Para facilitar este trueque, asociaciones de padres de los centros de enseñanza y diferentes administraciones educativas municipales promueven desde hace unos años programas específicos de intercambio. Consisten en entregar en el colegio los libros de texto que ya no se van a utilizar e intercambiarlos por los que se necesitarán en el nuevo curso académico.
Además de economizar en el gasto del material didáctico, se consigue una mejor utilización de los recursos.De este modo, además de economizar en el gasto del material didáctico, se consigue una mejor utilización de los recursos y se fomenta el cuidado de los libros como valor educativo y cultural. Este ejercicio de solidaridad y cooperación entre las familias, recomendado por las organizaciones y asociaciones de consumidores y usuarios, está en la actualidad implantado en numerosos centros del país.
Es recomendable que las familias interesadas en adquirir los libros escolares por esta vía consulten de forma previa en el centro o en las administraciones municipales la posibilidad de esta opción y recaben toda la información sobre la organización del proceso de intercambio. En general, el procedimiento se estructura del siguiente modo:
* En las fechas indicadas por el centro (en general, recién terminado el curso), las familias entregan los libros que ya no usarán.
* En el momento de la entrega, se valora y se revisa el material donado y se concede un recibo en el que consta el número de libros cedidos.
* En fechas posteriores, las familias acuden al centro con su recibo para recoger los libros que necesiten, que se corresponderán con el número de manuales entregados con anterioridad.
* La mayoría de los programas permiten que haya donación sin recibir nada a cambio. De este modo, familias que por cualquier circunstancia no han podido donar pueden acceder también al material.
* Si al final del programa quedan libros sin entregar, los organizadores los donan a la biblioteca escolar o a alguna ONG interesada en este material.
Fuente consumer.es