Preveer es prepararse para el futuro, es planificar un entorno de bienestar ante situaciones que inevitablemente habrán de suceder. Hacerlo habla de amor y de responsabilidad para con nuestros seres queridos. Cuando tomamos encuenta algo tan importante evitamos tomar desiciones en momentos emocionalmente complicados, evitamos gastos imprevistos y protegemos a nuestrios seres queridos al tener una solución integral.
A mí, junto con mi familia, me pasó algo muy desafortunado. Mi padre, después de una enfermedad degenerativa como la diabetes, después de todo el desgaste emocional, al ver cómo su salud iba de mal en peor, los gastos médicos dejaron a la familia sin ahorros.
Llegó el momento en que su cuerpo no aguantó más. Él ahora no está con nosotros, pero me enseñó que si no hay una previsión, la despedida es aún más dolorosa y muy dura, pues en lugar de podernos despedir de el en paz, teníamos la angustia de todos los gastos que el evento generó.
A mí ya me tocó vivirlo, por ello exorto a las personas que hagan conciencia, que piensen en cómo se quieren despedir de su familia, o de solamente estar protegidos, con una inversión que puede ser transferible. Es por amor a los que mas queremos.
Escrito por: Beatriz Franco