Clara regresó de unas maravillosas vacaciones por diferentes playas, estuvo en Los Cabos, y de ahí se pasó a Nuevo Vallarta. Fue casi un mes que, dice, disfrutó al extremo.
Ya de regreso en su casa de San Ángel, estuvo viendo los detalles con Sara, que decidió rentar su casa e irse a la casa de Clara, lo cual hizo que ella se pusiera muy feliz.
De vuelta a hacer maletas para irse por un tiempo indefinido a Italia, específicamente a Asís.
Clara ocupará una de las recámaras que da a la hermosa terraza llena de enormes macetones llenos de azaleas.
Clara dice que aprovechó al máximo las bellas playas, el sol, las clases de yoga y todo tipo de masajes que ofrecen en estos hoteles, de Todo Incluido, que son, dijo, una maravilla.
Sara ve como una aventura este cambio, Clara como una bendición.
Así que en breve Clara partirá y Sara se mudará.
Y… así es como se da la vida, con cambios, experiencias, expectativas nuevas.
La Primavera nos ha traído bríos de cambios, para todas, muy especialmente para Clara y Sara. Alguien dijo que la vida es un laboratorio de investigaciones diarias, buscando siempre nuevos campos en el bienestar y la salud.
Escrito por: Rebeca Harfuch