Escrito por: Carolina Reyes
M
aggy es una gata de color café claro con blanco. Tiene los ojos de color ámbar y la nariz rosa. Esta peluda y bigotona felina vivía en una protectora de animalitos; yo fui a ese lugar ya que me interesaba adoptar a algún gatito, esto porque desde hace mucho tiempo quería una mascota. Los perros también son geniales, me encantan pero no puedo tener uno porque habito un departamento, por lo que, según yo, un gato sería buena opción: no ocupa mucho espacio, son muy independientes y no estaría teniendo que sacarlo a pasear y eso.
"Ni me va a 'pelar', son tan independientes los 'mishos' que no creo que le preocupe mucho", pensé. El caso es que, cuando llegué a la protectora y platicando con las doctoras que atienden a los animalitos, me dijeron que cada gato tiene su personalidad y me mostraron a los 'bichitos'. En eso, una carita y unos ojos vivaces llamaron mi atención. Me acerqué y un suave ronroneo me conquistó: era Maggy, que se dejó apapachar y prácticamente, jajaja, sentí 'amor gatuno a primera vista'. Las doctoras la querían mucho y me dijeron que era muy limpia y bien portada. Entonces decidí adoptarla. Llegó en julio del año pasado a llenar de alegría mi hogar. Con ella
No compren, adopten, que cada animalito que ha padecido maltrato merece una oportunidad de amorhe aprendido que hay muchos mitos acerca de los gatos: que si son egoístas, que si son malos, que si son sucios y demás. En mi experiencia son seres únicos, ya que son muy inteligentes pero a la vez sensibles y cierto es que uno no tiene al gato, jajaja, los gatos se vuelven dueño de una. Maggy es muy cariñosa, nada egoísta y me tiene paciencia, jajaja; hay veces en que con su mirada pareciera que dice: "Paciencia con esta humana", jajaja. Es muy amorosa y también traviesa, eso sí, muy limpia.
Esta descripción, es sólo de mi gata; si bien está colmada de subjetividad ya que la quiero mucho, mi reflexión va en el sentido de que, si yo les puedo hablar sólo de una pequeña gata, imagínense qué historias contarían todos y cada uno de los gatitos que habitan el mundo. Les pido respeto para estas criaturas, así como a los perros y demás animales, que con su compañía nos enseñan a ser honestos, sin dobleces, pero sobre todo, que nos hacen llevadera la existencia. No al maltrato animal, la matanza cruel que el ser humano comete en contra de ellos. Sí a la vida y no compren, adopten, que cada animalito que ha padecido maltrato merece una oportunidad de amor. Si un ser humano puede aspirar a un cambio, ¿por qué no un pequeño peludo o peluda? Gracias por dejar compartir esto.