La educación es uno de los temas más hablados y estudiados, pero también es una de las cosas más difíciles de llevar a la práctica. En entrevista para Confesiones de Sofía, Daniel Rodríguez, experto pedagogo del Colegio de Pedagogos de México, habla sobre la educación de nuestros niños y adolescentes.
¿Cómo se inculca en un pequeño el hábito del estudio?
Los niños imitan a los papás y a las personas de su entorno, así que debemos educar con el ejemplo, si los niños nos ven tomar un libro por ejemplo, ellos pueden desarrollar el gusto por la lectura.
¿Qué estrategias de aprendizaje hay? ¿Cuáles son las mejores para los niños?
Existen muchísimas estrategias, en todos los niveles, son las que permiten tomar una decisión correcta. Para los pequeños, el juego es una gran estrategia. Empiezan a prestar atención a los objetos, a interrogar e interactuar, es importante que exista un reforzamiento verbal por parte de padres, maestros, tutores o las personas con las que se refuerce. También se debe reforzar por medio de imágenes similares y el reforzamiento debe ser concreto y claro, no debemos confundirlos con demasiada información. Estas son las bases que en un futuro le ayudarán a desarrollar otros conocimientos. Toda la vida el ser humano siempre está aprendiendo.
¿Qué hacer con jóvenes rebeldes?
De entrada debemos saber por qué es rebelde. En la secundaría, la rebeldía es una característica psicosocial, hay cambios físicos, de temperamento y de conducta, siempre y cuando su comportamiento no pase a conductas violentas, no es un gran problema.
Es importante el diálogo, que los padres se acerquen y sepan por qué actúa de cierta manera. También es importante considerar que lo que aprendimos en la niñez, nos forja en el futuro y será fundamental para toda la vida. Si está mostrando conductas contrarias a como era, identificar las causas que lo ocasionan, y si es algo grave, acudir a un especialista.
¿Qué tanta libertad se debe dar o no a los adolescentes?
De entrada, aunque suene muy trillado, no hay que confundir libertad con libertinaje. Los límites que se determinen tienen que ver con los padres y sus normas de conducta. Tal vez unos padres sobreprotectores, no permitirán mucha libertad a sus hijos.
No se pueden establecer parámetros porque depende del entorno. No se trata de prohibir, se debe dialogar y hacer ver al adolescente de qué forma podría afectar o qué consecuencias puede tener las decisiones que toma, saber hasta donde puede llegar.
La formación moral se consolida en la adolescencia, pero todo viene desde la niñez, se debe dar una orientación conforme a valores, ese es el primer paso.
¿Qué hacer con jóvenes que no estudian ni trabajan?
Esto viene de una estructura social, familiar e individual, en varios países de América Latina. Se deben hacer políticas educativas que involucren a todos los miembros de la sociedad. Depende de todos, no sólo de los padres, o maestros o el gobierno. Debe haber alternativas sociales y culturales, se deben abrir más espacios.
Se debe encontrar un cambio para que los jóvenes desarrollen sus habilidades, sus aptitudes y cubran sus intereses y necesidades.
Se necesita un bachillerato atractivo. Para un joven tal vez sea más atractivo dedicarse a actividades ilícitas que estudiar un bachillerato o universidad. Se debe hacer atractivo el estudio y trabajos serios.
¿Cuáles son los problemas que más preocupan a los padres de familia?
El primordial, es la violencia en las escuelas, el bullying. Y otra cosa que les debe preocupar es cómo se está enseñando en las escuelas, qué métodos y qué contenidos. Debe haber un crecimiento físico, mental y emocional para que puedan desempeñarse en la sociedad. Lo que aprendan, debe ser aplicable en su vida, no que lo aprendan enciclopédicamente, sino que realmente sea un aprendizaje útil para la vida.
¿En México existe realmente esa preocupación por lo qué se les enseña?
En México se le ha dado a la escuela el papel como única responsable de que los jóvenes aprendan, los padres muchas veces han desatendido la educación de los hijos. No saben qué han hecho, no conocen a los maestros, etc. Sabemos que en el entorno económico actual, en muchas familias, ambos padres trabajan y “no les da tiempo de ver al niño” pero 15 minutos que le dediquen, son más que valiosos.
Los padres tienen obligación de involucrarse y reforzar lo aprendido. La sola pregunta ¿qué viste en la escuela hoy? Ver que páginas utilizan para hacer sus tareas, y si son confiables y estar al pendiente de dudas que tengan. No siempre sabremos sobre las dudas que tengan, pero con las nuevas tecnologías de información, podemos adquirir la información que nos permita ayudarlos.
Lo importante es no dejar toda la responsabilidad de la educación a la escuela. Todos somos responsables.
También es importante acercarnos a profesionales de la educación e informarnos, saber que pasa con la educación de los niños, que estrategias hay, preguntar dudas, etc.