Familia

Nuestra familia y quienes somos

Durante años los psicólogos han señalado que nuestra forma de ser está determinada por rasgos del ambiente, así como una carga genética; ambas cuestiones relacionadas con nuestra familia. No cabe duda que la familia tiene gran impacto en quienes somos, pero quizás sea mayor de lo que pensábamos.

El lugar que ocupa el niño en la familia, las personas con la que convive en el hogar, la salud física y emocional de los padres, la cantidad de atención que recibe, si fue o no un niño deseado, etcétera; estos factores han sido señalados y reafirmados, en conjunto con el temperamento –esa carga genética que nos predispone a responder de una forma u otra ante las circunstancias– como determinantes en el desarrollo de la personalidad; sin embargo, además de estos factores que parecen ser más directos, también se ha visto que hay patrones que parecen repetirse dentro de familias, incluso con generaciones de diferencia.

Cada fase de nuestra vida tiene influencia en el desarrollo de la personalidad, cada experiencia nos ayudará a formar quienes somos. Pero ¿será posible que incluso antes de nuestro nacimiento existan raíces que afectarán nuestra forma de ver el mundo? ¿Las experiencias de nuestros antepasados pueden influir en quiénes somos?

La terapia de constelaciones familiares asegura que los antecedentes familiares influyen en nuestra vida; a través de una especie de transmisión cultural, que pasa de padre a hijos; de esta forma prevalecen características en nuestra forma de ver el mundo, pero no solo eso, sino que algunos de nuestros problemas presentes podrían estar vinculados a conflictos no resueltos por nuestros antepasados.

En ese inconsciente colectivo familiar quedan experiencias que marcan a la familia y, pese a no ser conscientes de estas, influyen en nuestra forma de actuar. Anne Shützenberger, psicoanalista francesa, afirma que estas repeticiones pueden ser una oportunidad de liberar a nuestro grupo familiar de esos conflictos no resueltos;  romper con esos ciclos a través de la toma de conciencia. Aunque no existen pruebas científicas de la validez de este tipo de terapia, entender la vida de nuestros antepasados, podría brindar un poco de luz a la nuestra y permitirnos conocernos mejor.

Escrito por: Elena Pedrozo

 

 

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*