La clamidia es una enfermedad de transmisión sexual silenciosa causada por una bacteria llamada Chlamydia trachomatis que afecta los órganos genitales de la mujer, al igual puede provocar secreción en el pene del hombre. Si no se atiende a tiempo puede acarrear graves consecuencias.
Esta infección es transmitida durante el acto sexual, ya sea oral, vaginal, anal e incluso durante el parto si es vaginal. Las personas homosexuales que mantienen relaciones sexuales corren igual peligro de contraer esta infección, debido a la forma de contagio. El llevar una vida sexual activa con múltiples parejas incrementa el riesgo de contraer la infección, al igual que las mujeres jóvenes sexualmente activas ya que el cuello uterino no se ha desarrollado en su totalidad.
Puede llegar a propagarse al recto y comúnmente de manera silenciosa. Si aparecen síntomas, estos se manifestarán entre la primer y tercer semana del contagio. Los síntomas podrían ser flujo vaginal anormal, sensación de ardor al orinar, dolor en la parte inferior del vientre, nauseas, fiebre, dolor en la espalda o al mantener relaciones sexuales o sangrado fuera del periodo menstrual.
La infección puede presentarse en la garganta de las personas que mantuvieron relaciones orales con una persona infectada. Si no se trata a tiempo la infección puede avanzar y tener consecuencias irreversibles reproductivos y de salud.
La enfermedad suele propagarse al útero o trompas de Falopio causando inflamación pélvica, esto sin presentar síntomas previos y causando daño permanente, como infertilidad, dolor pélvico crónico, embarazo ectópico lo que significa embarazo fuera del útero que podría llevar a la muerte, inclusive se vuelve más susceptible la persona a adquirir el VIH si hay exposición a él.
Es recomendable que las mujeres embarazadas, así como las jovenes con una vida sexual activa se realicen una prueba para detectar este tipo de padecimiento al menos una vez por año.
En los hombres puede originar dolor, fiebre e inusualmente esterilidad. Infrecuentemente puede conducir a la artritis, lesiones en la piel e inflamación de ojos y uretra.
Es primordial detectar a tiempo la clamidia para tratarla de inmediato sin problema alguno a base de antibióticos durante una semana.
La mejor opción siempre será el prevenir este tipo de contagios, teniendo una pareja estable o bien, asegurarse de que ya se haya realizado las pruebas pertinentes. El uso del condón sigue siendo la manera más segura y efectiva para cualquier enfermedad de transmisión sexual, en el caso de la clamidia, reduce el riesgo considerablemente.
Acuda una vez por año con su médico especialista para realizarse los estudios indicados, al igual que si presenta el más pequeño síntoma, el ser precavido puede cambiar su vida.
