Una hemorragia cerebral (también llamado hemorragia intracerebral, ICH) es un subtipo de hemorragia intracraneal, que en sí se produce en el cerebro. Puede ser causado por un trauma cerebral o espontáneamente puede ocurrir en un accidente.
Existen diversas causas por las cuales se pueden producir sangrados dentro de la cabeza: traumatismos, ruptura de malformaciones vasculares, hipertensión arterial, etc. En ocasiones, no es posible conocer la causa. Los problemas que provocan estos sangrados dependen de la zona del cerebro afectada y de la magnitud de la hemorragia.
Una hemorragia cerebral es una hemorragia intra-axial, es decir, que se produce en el tejido cerebral en lugar de fuera de él. La otra categoría de hemorragia intracraneal es hemorragia extra-axiales, tales como el hematoma epidural, hematoma subdural y hemorragia subaracnoidea, que ocurren dentro de la cabeza, pero fuera del tejido cerebral.
Las áreas del cerebro afectadas por la hemorragia son dañadas y, si se acumula un suficiente volumen de sangre en el espacio extravascular, se puede provocar una hipertensión intracraneal; la cuantía de la hemorragia determina la gravedad de este accidente vasculocerebral agudo. La tasa de mortalidad de estas hemorragias intraparenquimales es de 40%.
Genéricamente, los accidentes vasculares agudos que ocurren en el cerebro son conocidos genéricamente con la palabra latina ictus que significa golpe o ataque súbito, y que en inglés se traduce por "stroke" (una hemorragia cerebral se denomina en inglés "hemorrhagic stroke").
En consecuencia, en los accidentes vasculocerebrales agudos conviene distinguir frente al ictus hemorrágico o hemorragia cerebral ("hemorrhagic stroke") el ictus isquémico ("isquemic stroke") o embolia cerebral. Como quiera que la porción de un tejido del organismo privada de sangre por el bloqueo súbito de una arteria se conoce genéricamente como infarto, la lesión que es consecuencia de una embolia cerebral se conoce también como infarto cerebral
Tipos de hemorragias cerebrales existen.
- Se llaman HEMATOMAS EPIDURALES aquellos que se localizan entre las cubiertas del cerebro y el hueso del cráneo. Suelen estar provocados por traumatismos y requieren una intervención quirúrgica urgente para su evacuación.
- Los HEMATOMAS SUBDURALES AGUDOS se encuentran entre las membranas que forman las cubiertas del cerebro (meninges); requieren, así mismo, intervención quirúrgica más o menos agresiva según su tamaño. Suelen estar provocados por traumatismos.
- Los HEMATOMAS INTRACEREBRALES suelen ocurrir en personas de edad avanzada y están muy relacionados con un mal control de la tensión arterial, entre otras causas. La mayor parte no necesitan ser intervenidos a pesar de que provoquen déficits neurológicos.
- Los HEMATOMAS SUBDURALES CRÓNICOS aparecen a las semanas o meses tras un traumatismo banal (a veces, espontáneamente) y son más frecuentes en personas mayores, pacientes en tratamiento anticoagulante, alcohólicos, etc. Suelen evacuarse mediante trépanos conectados a drenajes a lo largo de varios días.
- La HEMORRAGIA SUBARACNOIDEA se localiza entre las cubiertas del cerebro y el propio cerebro. Suele aparecer por la ruptura de una o varias arterias cerebrales grandes anormalmente formadas (aneurismas, malformaciones arteriovenosas, etc.). Son situaciones graves que suelen requerir una estancia en Unidad de Cuidados Intensivos más o menos prolongada. La mayor parte de estas hemorragias se pueden tratar mediante una “técnica endovascular” (por el interior de las arterias, mediante un cateterismo); el resto de casos necesitarán una intervención quirúrgica.
Síntomas de una hemorragia cerebral
En todos los casos anteriores, el paciente puede llegar al hospital con síntomas muy diversos: dolor de cabeza, náuseas, vómitos, alteraciones de la visión, convulsiones, pérdida de fuerza en miembros, pérdidas de sensibilidad, dificultad o imposibilidad para hablar, disminución del nivel de conciencia o coma. En ocasiones la gravedad de la hemorragia es tal, que el paciente puede fallecer en las horas o días posteriores al sangrado a pesar de recibir el tratamiento correcto.
Los factores de riesgo de la hemorragia cerebral son:
- Hipertensión
- Diabetes
- Menopausia
- Tabaquismo
- Bebida alcohólica
- Cafeína
Escrito por: Dr. Alfonso Vega Sosa