El estrés se ha convertido parte de la vida diaria, sobre todo en grandes ciudades donde el ritmo de vida es muy acelerado. Ha llegado el punto en que a veces ni siquiera notamos que estamos estresados y necesitamos prestar atención a los signos antes de que sea muy tarde.
Un poco de estrés no es malo, pero cuando permitimos que el estrés se apodere de nosotros, corremos el riesgo de desarrollar diversas enfermedades –como diabetes, insuficiencia cardiaca o depresión– y reducir nuestra calidad de vida. Es necesario prestar atención a los signos de alerta de que estamos demasiado estresados ¿cuáles son los síntomas?
- Dolor de cabeza
- Cansancio
- Falta de energía
- Mala memoria
- Malestar estomacal
- Estreñimiento o diarrea
- Aumento de peso
- Mandíbula rígida
- Cuello rígido
Existen muchas posibles causas para el estrés: el trabajo, la salud, la familia, las cuentas por pagar, cambios en la vida y una larga lista de etcéteras. El estrés en sí no es malo, puede ayudarnos a ser más eficientes, pero es su presencia constante lo que puede causarnos daños físicos y emocionales. A veces es necesario hacer una pausa para poder continuar con nuestras actividades. Hay cosas que podemos hacer para ayudarnos a combatir el estrés, entre ellas:
- Hacer ejercicio
- Dormir bien y suficiente
- Aprender a organizarnos
- Tener una buena alimentación
- Aprender a manejar nuestras emociones
- Ejercicios de respiración
Lo más importante es entender que el estrés es una señal de alerta de nuestro cuerpo y es necesario aprenderlo a escuchar.
Escrito por: Elena Pedrozo
Fuente: Medline Plus