La creatividad es una cualidad que podemos aplicar a cualquier área de nuestra vida, normalmente se le relaciona con las artes, pero podemos ser creativas en todos los aspectos: nuestro trabajo, nuestras relaciones, las cosas que hacemos. Para ser más creativa aquí te dejamos algunas formas para estimular tu creatividad.
Destruye tus ideas actuales. Muchas veces es necesario romper con lo que tenemos establecido para poder crear cosas nuevas. Puede que la forma en que haces algo funcione bien, pero si no te cuestiones que podría estar mal con esa forma de hacerlo, no pensarás en formas para hacerlo mejor. Sentir que las cosas están bien se siente bien, pero esto no favorece la innovación. Reexamina tus patrones de pensamiento, induce esa inquietud para que puedas desarrollar nuevas ideas. Haz un esfuerzo para buscar los defectos, y luego busca nuevas soluciones.
Piensa más allá de los datos. Muchas veces en el trabajo nos enfrentamos a grandes cantidades de datos y por más que buscamos, esos datos no nos dan una conclusión clara sobre el porqué resultaron así. Piensa más allá de lo que tienes enfrente, busca variables que pudieron no haber sido consideradas para encontrar nuevas soluciones.
Ve las soluciones como un nuevo comienzo. Cuando resolvemos un problema lo más común es cerrar el caso y dejarlo de lado. No lo hagas, a partir de la forma en que lo resolviste obtienes un aprendizaje, pero esto te puede abrir las puertas a nuevas formas de hacer las cosas, pregúntate sobre las conclusiones, permite que surjan dudas, piensa si efectivamente diste con la mejor solución o pudiste hacer algo mejor, pon a trabajar tu mente en la búsqueda de nuevas respuestas.
No te aferres a tus ideas. Puede que una idea funcione bien al principio, pero si nos aferramos a ella nos estancamos, debemos estar siempre abiertos a cosas nuevas, una idea nueva lo es sólo por un tiempo, procura soltar tus ideas para que puedas refrescar constantemente tu pensamiento. También debes ser conciente de que no todas las ideas funcionan siempre, debes poder saber distanciarte de tus ideas lo suficiente para que no te cueste dejar de lado las que no sirven, y aprender de tus errores.
Evita desechar ideas. A menudo cuando intentamos pensar una idea, viene a nuestra mente algo que al instante nos parece una mala idea, no la deseches, tal vez no sea la idea que estas buscando, pero junta todas tus ideas, buenas o malas, y de todo eso puede surgir una buena idea. Si nos cerramos a que algo no va a servir lo desechamos, estamos cerrando nuestra mente a pensar en nuevas posibilidades.