Un corazón fuerte y saludable es vital para la longevidad. Mucho se dice sobre “corazones rotos” y sobre cómo “robar corazones”, pero conocer el funcionamiento y los cuidados de la salud de nuestro corazón resulta fundamental para evitar enfermedades y mantenerlo en el mejor estado.
De acuerdo con datos de la Organización Mundial de la Salud, las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en el mundo. Además, las enfermedades cardiovasculares son la causa de muerte número uno en México según el INEGI.
A continuación presentamos los datos más importantes sobre este músculo vital y cinco recomendaciones de alimentos que te ayudarán a cuidarlo.
- El corazón humano late en promedio 100,000 veces al día, 35 millones de veces al año y más de 2.5 billones de veces a lo largo de la vida.
- El corazón bombea aproximadamente 5.6 litros de sangre a todo el cuerpo tres veces cada minuto. En un día, la sangre recorre un total de 19,000 km, el equivalente a ir de la Ciudad de México a Cuernavaca 246 veces.
- Toma una pelota de tenis en una mano y apriétala fuerte. Esa es la misma fuerza que el corazón emplea para bombear sangre a todo el cuerpo. Incluso en reposo, los músculos del corazón trabajan más fuerte que los músculos de las piernas de una persona al trotar.
- El corazón de un niño es del tamaño de su puño cerrado. Cuando se convierte en adulto, el tamaño del mismo aumenta a dos veces el tamaño de su puño cerrado.
- La aorta, la arteria más grande del cuerpo, es casi del ancho del diámetro de una manguera casera. Las capilares, por otro lado, son tan pequeñas que se necesitarían diez de ellas para que midieran lo mismo que el ancho de un cabello humano.
Es recomendable consumir una dieta sana con micronutrientes que favorecen la salud del corazón:
- Incluye Omega 3 – DHA
El DHA es un componente clave del corazón, especialmente del tejido conductor, y es importante para la salud del corazón a lo largo de la vida. Grandes estudios observacionales y estudios de intervención clínicos mostraron que los ácidos grasos poliinsaturados omega-3 de cadena larga pueden reducir el riesgo de enfermedades cardíacas coronarias. El DHA lo puedes encontrar en el salmón, sardinas y atún, así como en suplementos y alimentos fortificados.
El DHA funciona como un cardioprotector, haciendo que el colesterol malo (LDL) no se deposite en las paredes de las arterias. Asimismo, el DHA contribuye para la reducción de los niveles de triglicéridos en la sangre.
- Consume Beta-glucano
Es una fibra soluble que se encuentra principalmente en la avena, ayuda a reducir el colesterol malo. Es un ingrediente derivado naturalmente y es muy conocido por los beneficios que otorga a un corazón sano. Múltiples estudios médicos han mostrado que la ingesta regular de 3-4 g. de este nutriente puede auxiliar a reducir la absorción del colesterol.
- No olvides los antioxidantes
Son sustancias naturales que existen como vitaminas, minerales y otros compuestos de los alimentos y que interactúan con los radicales libres. Procurar consumir nueve porciones (cada una del tamaño de un puño) por día de frutas y verduras lavadas frescas con la piel ayuda a maximizar el consumo de estos nutrientes.
- Elimina el exceso de sal
El exceso de sodio eleva la presión arterial. Elige sazonadores naturales como hierbas (romero y tomillo) que además contengan antioxidantes.
- Consume alimentos fortificados y suplementos alimenticios
La falta de micronutrientes puede tener efectos adversos en el crecimiento y el desarrollo físico e intelectual general. Consumir las cantidades recomendadas de estos micronutrientes puede facilitarse a través de suplementos alimenticios y alimentos fortificados.