¿Cuántas veces has dicho la frase “hoy voy a cambiar”? Te revelamos algunos secretos para lograrlo.
Practicar la auto-observación
Observarnos y escucharnos cuando actuamos nos ayudará a reconocer aquellos aspectos de nuestra personalidad y comportamiento que debemos cambiar. Observarnos sin juicio y sin crítica, tratándonos con gentileza, hará que sea más sencillo conseguirlo.
Reconocer el problema
Es muy importante que seamos capaces de reconocer por nosotros mismos que tenemos un problema y no por la manipulación o la influencia de los demás. Sólo así podremos hacer cuanto sea necesario para superarlo.
Asumir la responsabilidad
Mientras insistamos en buscar culpables de lo que nos pasa, no podremos hacer algo concreto para cambiarlo. Asumir nuestra responsabilidad en la situación que estamos experimentando hará que estemos dispuestos a revisarnos y a cambiar.
Hacer el compromiso
La vida de muchas personas está llena de decisiones que tomaron en momentos de crisis, pero que, por falta de un verdadero compromiso, nunca se convirtieron en acción. Asumamos el compromiso de hacer cuanto sea necesario para transformar nuestra manera de actuar.
Aceptar el miedo
Muchas veces el miedo puede ser el obstáculo que nos impida asumir el compromiso de cambiar. Reconocer el temor que se esconde detrás de nuestra negativa a hacer el cambio hará que dejemos de justificarnos y asumamos la responsabilidad de transformarnos.
Confiar en los recursos internos
Cuando creemos que somos capaces de cambiar una creencia, una actitud o un comportamiento, tenemos 50% de lo que necesitamos para lograrlo. La autovaloración, la confianza en nosotros mismos, la voluntad y el compromiso harán que el proceso sea mucho más sencillo.
Acciones concretas
Algunas personas creen que sólo con analizar una situación ya la resolvieron. Pero lo cierto es que necesitamos incorporar la teoría a nuestro estilo de vida, para así cambiar el hábito que nos causa malestar o la dificultad.
Aprender de los fracasos
No importa cuántas veces lo hayamos intentado sin conseguirlo, lo determinante es que tengamos la voluntad de lograrlo. Cada experiencia es una oportunidad de aprender y de conseguir las herramientas que necesitamos.
Disfrutar el proceso
Para muchas personas cambiar es sinónimo de sufrimiento. En lugar de pensar en todos los supuestos obstáculos que enfrentaremos, deberíamos imaginar todo lo bueno y lo positivo que nos traerá, de manera que estemos más dispuestos a disfrutarlo y a favorecerlo.
Fuente: Quitémonos Foro