El bebé...
La piel delgada y rojiza del bebé está cubierta por una sustancia gruesa, blanca y cerosa llamada vermix o unto sebáceo. Ésta protege la piel del bebé contra las sustancias del líquido amniótico.
De ahora en adelante, el bebé empieza a desarrollar sus sentidos, especialmente el tacto y el gusto.
El sistema límbico del bebé está en pleno desarrollo y será el encargado de controlar los sentimientos y las emociones. Aunque parezca increíble, ésto le permitirá tener cambios en el estado de ánimo en las próximas semanas. Las uñas, párpados y cejas del bebé son visibles. Sólo faltan las pestañas.
El bebé mide 19 centímetros y pesa 340 gramos.
Si en las semanas previas hay movimiento del bebé, ahora se notará. A lo largo de las semanas 19 a 22 comeinzan las famosas pataditas del bebé dentro del abdomen.
La mamá...
El útero habrá crecido hasta el ombligo. Por ello, la barriga será más grande y el peso seguirá aumentando.
La respiración se hace más profunda y el ritmo cardíaco se acelera. Tener sueño y seguir con cansancio es normal. El cuerpo ha cambiado mucho desde las primeras semanas. Es hora de dormir mucho y olvidarse de los grandes esfuerzos.
Fuente: Club Parenting