Lo que comemos o dejamos de comer tiene gran importancia en nuestro control de peso, debemos elegir alimentos que nos ayuden a lograr nuestro objetivo, y un gran aliado pueden ser los champiñones.
Los champiñones tienen un contenido muy bajo de calorías, por lo que se pueden comer en grandes cantidades. Además, nos brindan ácido fólico, vitamina D, vitamina B2 y una cantidad considerable de fibra. Contienen también mucho zinc y proteínas por lo que pueden ser un buen sustituto de la carne. Las vitaminas que contienen también evitan la caída del cabello y mejoran es aspecto de las uñas.
Es un alimento versátil que se puede incluir en diversidad de recetas y su consumo regular podría ayudar a bajar de peso. Según un estudio llevado a cabo por la Universidad Johns Hopkins que comparó su consumo al de la carne. Los champiñones brindan una sensación de saciedad que dura más tiempo y el aporte de fibra ayuda a nuestro sistema digestivo a funcionar mejor, por lo que favorece la pérdida de peso.
Además de su potencial como auxiliar en la pérdida de peso, comer champiñones habitualmente, puede reducir el riesgo de padecer cáncer, problemas del corazón o diabetes, también son una gran fuente de antioxidantes.
