La diabetes es una enfermedad ligada los hábitos y al estilo de vida, no tiene cura, pero se puede prevenir. Mejorar nuestros hábitos puede hacer una gran diferencia en nuestra calidad de vida y reducir no sólo el riesgo de diabetes, sino de muchas otras enfermedades.
Existe un factor genético en la enfermedad que aumenta las posibilidades de desarrollarla, pero no es lo único. Nuestros hábitos juegan un papel importante. Es por eso que aquí te decimos 10 claves para prevenir, o al menos retrasar, la aparición de la diabetes tipo 2.
Haz ejercicio. El ejercicio es una de las mejores cosas que podemos hacer por nuestra salud. Mantener un peso saludable y tener un buen control de la glucosa, son solo un par de los muchos beneficios que brinda el ejercicio, física y mentalmente. Es por eso que una de los primeros pasos para una vida más saludable es adoptar el hábito, al menos 30 minutos al día serán suficientes.
Reduce el consumo de refrescos y golosinas. Una de las mayores dificultades para cambiar nuestra forma de comer es la idea de renunciar a todo eso que aunque sabemos que nos hace daño, nos gusta. Si te cuesta mucho trabajo de cortar de tajo, una buena idea es reducir el consumo al mínimo. Quizás en ocasiones especiales o una vez al mes.
Bebe mucha agua. Necesitamos el agua para hidratarnos; el agua contribuye a mejorar la digestión, normaliza nuestra presión sanguínea, ayuda a remover desechos, mantiene nuestra piel tersa y firme. Aunque la relación con la prevención de la diabetes no parezca ser muy directa, es fundamental para mantener nuestra salud y es una alternativa excelente a los refrescos y golosinas; si sientes antojo de algo azucarado, mejor toma agua para combatir la ansiedad por ese dulzor.
Come muchas frutas, verduras y granos. Sabemos que suena a comercial, pero es clave para tener una dieta balanceada y son una importante fuente de fibra, lo que ayuda a procesar los carbohidratos y azúcares. Además de ayudar a prevenir la diabetes, también puede reducir el riesgo de enfermedades cardiacas.
Deja de fumar. El tabaquismo es uno de los principales factores de riesgo para el desarrollo de la diabetes y es también uno de los más modificables. Deja el cigarro y que sea de tajo.
El alcohol, con moderación. El alcohol puede elevar los niveles de glucosa en la sangre, pero si su consumo es moderado, no habrá riesgos. Poco o nada de alcohol será clave para prevenir la diabetes.
Hazte revisiones periódicas. Acudir al médico para revisiones de rutina es importante, especialmente si tienes antecedentes de diabetes en tu familia. El doctor no sólo te orientará para que tengas un estilo de vida más saludable, sino que gracias a los estudios de rutina podrán detectar tempranamente cualquier anomalía en tu salud. Recuerda que la diabetes es una enfermedad sin síntomas, entre más pronto se diagnostique, tendrás una mejor calidad de vida.
Escrito por: Elena Pedrozo
