¿Sabes por qué en los restaurantes normalmente utilizan tonos naranja? ¿Por qué los doctores y enfermeras visten de color blanco? ¿Por qué se dice que una persona que no destaca mucho es gris? El color es parte importante de nuestra visión, vemos el mundo a través de colores y formas. Culturalmente hemos asignado significado a los colores de acuerdo a lo que nos hacen sentir, al mensaje que nos dan. Así el color blanco nos remite a pureza y limpieza – lo que nos da mayor confianza en los doctores – y el color gris está asociado con la neutralidad, es un color que no nos brinda mucha emoción.
Los colores tienen un efecto psicológico en nosotros, nos transmiten mensajes, pueden favorecer las ventas de un producto o calmar a las personas. Por ejemplo, el color naranja es utilizado en los restaurantes porque favorece el apetito. Estar conciente de lo que transmiten los colores que utilizamos nos puede ayudar a proyectar una mejor imagen. La psicología del color explica el tipo de emociones que nos genera cada color.
Negro – Este color refleja autoridad, poder y fuerza. También está asociado con la inteligencia. Es un color popular ya que hace a las personas lucir delgadas. Es un color serio que provoca emociones fuertes.
Blanco – Es un color asociado a la limpieza, la pureza y la seguridad. También proyecta neutralidad. En algunos países de oriente, es el color asociado al luto.
Rojo – Es comúnmente el color que primero capta la vista. Es un color lleno de energía, asociado al movimiento y capaz de acelerar el corazón.
Rosa – Es el más calmante de todos los colores, capaz de calmar la agresión. Es el color del romance, el amor y sentimientos nobles.
Azul – Es un color que nos tranquiliza y nos relaja, de hecho, es capaz de provocar la producción de químicos calmantes. Es el color de la estabilidad, la sabiduría y la lealtad.
Verde – Es un color calmante, de armonía, paz y energía. Está asociado a la naturaleza y al crecimiento, pero también a la envidia y el dinero.
Amarillo – Es un color muy alegre, asociado a la risa y la felicidad. Cuando una persona está rodeada de amarillo el cerebro produce mayor serotonina, haciéndonos sentir mejor.
