No podemos negar que la ira o enojo es algo que nos cuesta trabajo controlar. Muchas personas sienten una especie de alivio cuando logran expresar de esta manera lo que traen dentro. El problema es que este comportamiento es nocivo para el que lo recibe, pero también para quien lo emite. Es cuando necesitamos hacer un viaje hacia nuestro interior para entender estas emociones y aprender a controlarlas. Aquí algunos consejos:
- Respira profundo cuando sientas que estás a punto de explotar.
- Ten a la mano algo que puedas masticar o estrujar con tu mano. Cuando te enojes, descarga tu ira en dichos objetos y verás cómo tu ímpetu disminuye.
- Evita a la gente que sabes que te provoca malestar y enojo. Es la mejor estrategia cuando no puedes eliminar la fuente completamente.
- Si tu enojo te provoca estrés, trata de relajarte haciendo yoga o ejercicio.
- Escucha la música que te resulte más relajante.
- Si eres una persona espiritual, enfócate en actividades relacionadas con ello.
- Una firme convicción y una mente dispuesta son las claves para lograr controlar tu ira.
Escrito por: Roly B.
