Escrito por: Paloma Sly
Creo con mayor firmeza, que entre más años cumplimos, apreciamos mucho más todo lo que a nuestro alrededor está, hasta un suspiro sabe a canela, el aroma de las mañana son más agradables, algunas veces no hace falta tener hierbabuena en casa, el aroma es ese, fresco, delicado, exquisito amanecer es una bendición, es una nueva historia, un nuevo sueño a conquistar, es el comienzo de una nueva página en una vida ya hecha, pero en continuidad de logros, aciertos y fracasos.
No sé si te pasa, pero en ocasiones escuchando una melodía que nos trasmite paz, sacamos sentimientos profundos, y algunas veces, hasta poetizas somos….
Hay bellas canciones que nos traen recuerdos o remembranzas, es como si platicaran con nosotras y nos motivaran a expresarnos abiertamente, así, sin temor a nada, ni siquiera a nuestro interno yo, sólo abrimos el alma, el espíritu y ahí está, la verdad de un corazón sincero.
Exquisita es la vida, es sencillamente un regalo que seguramente merecemos y por ello lo tenemos, el juguito de una mandarina dulce, estando de pie ya nos cataloga como ganadores, como seres de éxito., los logros, triunfos y recompensas, con el tiempo y nuestra dedicación llegan, eso es definitivo.
Los desaciertos son la sal y pimienta de nuestro andar, los tropiezos son la miel amarga del progreso, del camino a la perfección, de la misión hacia la humildad.
Qué importante es la humildad para todo ser humano ¿no creen?
Es algo que aprendí de mi viejo, ese viejo maravilloso que extraño y más aún cuando necesito un consejo y no lo tengo, mi viejo sabio, así era él, un hombre de una sola pieza, de bella esencia, él era mi abuelo materno, pero en realidad mi auténtico padre, cuando el mío partió a ese otro mundo feliz, donde no hay regreso y donde sé estará bien también. Mi viejo me enseñó entre otras muchas cosas, a ser una persona a la que la gente pudiese llamar gente, así como lo dice esa bella reflexión escrita por un enorme de la pluma y el papel…..
"LA GENTE QUE ME GUSTA"
Mario Benedetti.
Me gusta la gente que vibra, que no hay que empujarla, que no hay que decirle que haga las cosas, sino que sabe lo que hay que hacer y que lo hace en menos tiempo de lo esperado.
Exquisita es la vida, es sencillamente un regalo que seguramente merecemos y por ello lo tenemos Me gusta la gente con capacidad para medir las consecuencias de sus acciones, la gente que no deja las soluciones al azar.
Me gusta la gente estricta con su gente y consigo misma, pero que no pierda de vista que somos humanos y nos podemos equivocar.
Me gusta la gente que piensa que el trabajo en equipo, entre amigos, produce más que los caóticos esfuerzos individuales.
Me gusta la gente que sabe la importancia de la alegría.
Me gusta la gente sincera y franca, capaz de oponerse con argumentos serenos y razonables.
Me gusta la gente de criterio, la que no se avergüenza de reconocer que no sabe algo o que se equivocó.
Me gusta la gente que al aceptar sus errores, se esfuerza genuinamente por no volver a cometerlos.
Me gusta la gente capaz de criticarme constructivamente y de frente; a éstos los llamo mis amigos.
Me gusta la gente fiel y persistente, que no fallece cuando de alcanzar objetivos e ideas se trata.
Me gusta la gente que trabaja por resultados. Con gente como esa, me comprometo a lo que sea, ya que con haber tenido esa gente a mi lado me doy por bien retribuido.
Bellísimo ¿no?
Gracias a mi amigo que me regaló algo tan bello, tan delicioso, tan constructivo…
Gracias a ustedes, a quienes leen mis artículos y más aún, se toman un espacio para sus comentarios que endulzan parte de mi vida poética y cursi, gracias a la vida por dejarme ser su amiga y continuar de la mano, gracias a Dios por dejarme respirar.
Escrito por: Paloma Sly
