El principio de esta dieta disociada consiste en
no combinar hidratos de carbono con proteínas, ya que al comerlos por separado se puede lograr bajar de peso.
Este tipo de dieta en los años 60 fue de mucha demanda, algunos deportistas siguieron la dieta disociada escandinava para prepararse físicamente a nivel competitivo.
Dentro de este tipo de regímenes diferenciados los métodos más conocidos son los de
Anthony Shelton y Montignac, los cuales pueden ser rutinarios, pero han demostrado mucha efectividad a nivel resultados.
En que consiste la dieta disociada:
Se basa en la distribución de los alimentos, no en la cantidad, durante las 24 hs del día. Se comienza por un
desayuno basado en fruta y el
almuerzo debe basarse en glúcidos, donde se puede comer a voluntad, pastas, pan, patatas, harinas, legumbres, azucares, arroz, sin ningún tipo de proteína, como las contenidas en carnes, huevos, pescados, lácteos.
Al llegar a la
cena, es a la inversa, la ingesta se basa sólo en las proteínas.
Antes de iniciar con la dieta disociada se debe ser evaluados en función del estado general de salud, con el médico, ya que pueden causar un desequilibrio nutricional relativamente grande. Está por demás decir que requiere de una gran disciplina.