A veces, cuando los días están soleados, se nos antoja disfrutar de una cerveza fría, ya sea sola o servida con limón, sal y quizá un toque de picante, aunque tal vez no estamos seguras de sí será una buena idea; dudamos del impacto que pueda tener en nuestro peso y nuestra salud. Sin embargo, son diversos los estudios que respaldan la creciente evidencia de los beneficios que tiene el consumo moderado de cerveza como parte de un estilo de vida saludable.
De acuerdo a The American Journal of Medical Sciences, desde el punto de vista nutricional, la cerveza es una excelente fuente de proteínas y vitamina B. Datos recabados por el Journal of Agricultural and Food Chemistry comprueban que la cerveza contiene antioxidantes que son importantes aliados para defender al cuerpo de la inflamación radicales libres y enfermedades crónicas.
Adicionalmente, la cerveza obscura contiene nutrientes importantes como proteína y hierro que promueven un corazón saludable por medio de fibra soluble, vitamina B6 y folato. Finalmente, el Journal of the American Society of Brewing Chemists afirma que el lúpulo, uno de los ingredientes clave de la cerveza, contiene diferentes tipos de antioxidantes con propiedades anti-bacteriales, anti-inflamatorias, anti-oxidativas, anti-cancerígenas y anti-ostoporeóticas.
Son muchos los estudios que defienden la idea de incluir el consumo de cerveza, con moderación, en nuestra dieta. Aquí te dejamos 8 razones para disfrutar de una sin sentir culpa.
- Previene problemas del corazón: De acuerdo a un estudio reciente de la Clínica Mayo (2014), tomar con moderación, es decir una cerveza al día para mujeres y hombres mayores de 65 años, y dos al día si se trata de hombres menores de 65 años, disminuye la posibilidad de desarrollar enfermedades cardiacas.
- Fortalece los huesos: De acuerdo a un estudio realizado por la Universidad de Cambridge en 2011, la cerveza contiene un gran índice de silicio, un nutriente que ayuda a fortalecer los huesos.
- Diurético: ¿Has notado como apenas terminas de tomar cerveza tienes ganas de ir al baño? Esta reacción del organismo se debe a las propiedades diuréticas que tiene la cerveza. Los diuréticos ayudan a eliminar sales y líquidos retenidos del cuerpo y disminuye la cantidad de fluidos que están en la sangre y en los vasos sanguíneos, disminuyendo a la vez la presión en las arterias.
- Inhibe agentes cancerígenos: Los lúpulos usualmente utilizados en el proceso de fermentación de la cerveza contienen un compuesto llamada xantohumol que se utiliza en tratamientos de prevención contra el cáncer. Un estudio publicado en la revista Molecular Cancer Therapeutics, afirma que “el xantohumol tiene un excepcional espectro de mecanismos que inhiben el inicio, desarrollo y progreso de los agentes cancerígenos”.
- Mejora el aspecto de la piel y los ojos: La cerveza tiene un alto contenido de Vitamina B, un poderoso antioxidante que ayuda a mantener la belleza natural de la piel y los ojos.
- Disminuye el riesgo de diabetes: Un estudio publicado por la Asociación Americana de Diabetes, encontró que las personas que toman cerveza moderadamente, tienen alrededor del 30% menor posibilidad de contraer diabetes tipo 2.
- Previene derrames: Una estudio realizado por Harvard Medical School demuestra que tomar cerveza con moderación ayuda a prevenir derrames isquémicos y disminuye la coagulación de la sangre. Además, es baja en sodio, elemento que en exceso provoca este tipo de padecimientos.
- Acelera el metabolismo: Un estudio realizado por investigadores de la University College of London y el Institut Klinicke a Experimentalni Mediciny en Praga en el 2003, concluyó que las personas que beben cerveza de forma regular y moderada no tienen la famosa panza chelera; por el contrario, tienden a pesar menos que las personas que no toman. La cerveza acelera el metabolismo, evita que tu cuerpo absorba grasa y te hace más saludable, cuando es tomada con moderación.
Ahora ya sabes que la cerveza lejos de afectar la salud o provocar esos kilos de más, es un producto que ingerido con moderación te ayudará a vivir más pleno, feliz y por más tiempo. Además, acelera tu metabolismo, lo que te permitirá perder grasa y bajar de peso, y te ayudará a mejorar tu salud general y reducir el riesgo de infartos. ¿Qué más se puede pedir?
