Bienestar

El poder en la mujer

el-poder-en-la-mujerCuando decimos el ”poder de la mujer”, nos suena muy extraño. Algo así de contradictorio como decir “el sexo débil”. Mujer poderosa es casi una contradicción, una suerte de oxímoron. ¿Somos las mujeres poderosas? ¿Seré yo poderosa? Claro que sí. Sólo que no nos gusta el término tal y como se entiende normalmente.

Si algo nos distingue en buena medida de los hombres es que a ellos les encanta sentirse poderosos en lo personal. “Yo sé llegar solo. No necesito preguntarle a nadie”.  Vale. Nosotras, en cambio, encontramos un cierto placer tanto en pedir ayuda como en darla. Nos encanta tener amigas a quién recurrir para un consejo. Y esto no nos hace débiles.

Muchas mujeres que van subiendo la escalera corporativa o pública se llegan a avergonzar de su “poder”. Y es que necesitamos redefinir la palabra. Sí de lo que se trata es de una orden vertical, donde nos deberíamos sentirnos conquistadoras arriba de una pirámide, pues la verdad no nos gusta. Pero si se trata de cooperar desde nuestra posición, de una manera horizontal, donde lo que hacemos tiene sentido para muchas otras personas, entonces sí tiene sentido nuestro poder.

Cooperación

Algo hay de cierto cuando vemos que los hombres quieren estar en la cima del mundo y nosotras lo que queremos es cambiarlo. El hombre parece gozar siendo él mismo la diferencia en el mundo, nosotras tendemos a gozar haciendo entre todas un mundo diferente. Si lo que haces tiene sentido para tu empresa, para tu familia, para tu colonia, puedes sentirte segura de que estás cambiando al mundo. Y lo estás haciendo como mejor sabemos hacerlo: ayudándonos unas a otras.

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