Leer es un hábito que se inculca desde casa y si queremos que nuestros niños lo adquieran, es importante partir del ejemplo. Leer con ellos es una de las mejores formas de hacer que aprendan a disfrutar la lectura. Pero no siempre sabemos con qué libros empezar; si no lo tienes claro, aquí te damos algunas ideas.
Momo – Michael Ende
Momo es una niña con una habilidad muy peculiar; sabe escuchar. Ella disfruta el tiempo con sus amigos hasta que llegan los hombres grises, que intentan convencer a todos de que deben ahorrar su tiempo para después; pero todo es una estafa y Momo, con sus cualidades únicas, es quién puede detenerlos.
Cuentos en verso para niños perversos – Roald Dahl
Los cuentos clásicos son una opción recurrente para acercar a los niños a la lectura. Pero en este libro, Roald Dahl nos cuenta una nueva versión en la que Ricitos de Oro no es tan tierna, los lobos deben cuidarse de caperucita y el príncipe de Cenicienta no es tan encantador como parece. Son cuentos clásicos cargados de humor que todos disfrutarán.
Diario de Greg – Jeff Kinney
Se trata de una serie de libros que siguen la vida de Greg Heffley, un adolescente que narra sus aventuras en sus diarios. Diario de Greg inició como un conjunto de historietas en internet, pero a medida que fue ganando notoriedad, surgió el interés publicar los libros y actualmente hay once libros publicados.
La telaraña de Charlotte – E.B. White
Este libro narra la historia de Wilbur, un cerdo al que están a punto de enviar al matadero. Pero gracias a la intervención de Charlotte, una araña con la que hace amistad, comienza una vida diferente para Wilbur.
Harry Potter – J. K. Rowling
Sin duda hay un antes y un después en el mundo de la literatura infantil y juvenil con Harry Potter. El joven mago y su mundo fantástico hicieron que muchos niños y no tan niños se acercaran al mundo de las letras. A veinte años de su primera edición, sigue siendo una buena opción para abrir las puertas del mundo de la lectura a nuestros hijos.
Es importante que no impongas la lectura a tus hijos. Leer no tiene que ser visto como una obligación o un ejercicio pesado, sino como algo para disfrutar. Es por eso que es importante que tomen parte en la decisión de los libros que van a leer y que si un libro no les motiva, no los obliguemos a terminarlo.
Los gustos y necesidades de cada niño son diferentes, y el que uno de tus hijos sea fan de una historia no significa que tenga el mismo eco en otro. Estas son solo algunas sugerencias, lo mejor es darle la oportunidad de explorar y conocer, esto hará que tu niño encuentre los libros que son para él. Pues a menudo no se trata de que a las personas no les guste leer, sino que simplemente no han encontrado el libro adecuado para ellos.
Escrito por: Elena Pedrozo
