Bienestar

Los finales en la vida real

finalvidarealEscrito por: Evangelina Jiménez

En las películas los finales siempre son felices, llega Él al aeropuerto antes de que Ella aborde el avión y le grita por el micrófono frente a todos que la ama, se besan y “tan, tan”. O Ella se da cuenta que siempre ha estado enamorada de Él, así que, le pide a su mejor amiga que la lleve a la iglesia y justo cuando el padre pregunta si hay algún impedimento Ella grita “no te cases, te amo” y… FIN. ¡Me encantan los finales de película!

¿A ustedes no? ¡Ay cómo no! el malo al final se muere y vivieron felices para siempre, están padres, lo que me da risa es que ya no sabemos lo que pasa después, qué tal que no se llevan bien o que el hijo del malo regresa y los mata, no sabemos, ya no sale en la pantalla, así que nos quedamos con ese FIN determinante.
En la vida real no pasa eso, cuando renunciamos a un trabajo o nos corren, cuando terminamos una relación amorosa o de amistad, cuando acabamos la carrera, cuando dejamos de ver por largo tiempo a la familia, cuando nos vamos de nuestra casa, cuando llega el matrimonio o el divorcio, en ningunaTodo final en la vida real es un inicio, es una nueva oportunidad, un respiro, un chance que te da la vida para volver a empezar de esas situaciones hay un FIN ni salen créditos con nuestro nombre.
Después de cualquiera de esos acontecimientos u otros, lo que hay es un INICIO, todo final en la vida real es un inicio, es una nueva oportunidad, un respiro, un chance que te da la vida para volver a empezar, siempre es un excelente día para volver a empezar.
Así que no se azoten, nada es para siempre y nada es para tanto, los finales que van sucediendo en nuestras vidas son solamente un inicio de “algo”... ¿Qué? Pues el tiempo lo dirá, nuestras acciones nos encaminarán a una nueva historia que es contada por la rutina, por el día a día y mientras sigamos respirando podemos ir construyendo los inicios sobre los inicios que nosotros queramos.
En el mundo fuera de las pantallas, los finales no son definitivos, a menos que hablemos de muerte y ni así, tengo mis serias afirmaciones de que no sólo somos cuerpo, pero eso como diría “la abuelita” es otra historia.

Escrito por: Evangelina Jiménez

Foto: Celadus

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