Bienestar

Mi experiencia al padecer fibromialgia

C

reo que algo de lo mucho que hemos vivido la mayoría de las personas que padecemos una enfermedad como la fibromialgia, es que aunque nos quejemos y tratemos de explicarles a muchas personas, parece que nuestras palabras no tienen sonido, no son escuchadas, no son entendidas.

Muchos piensan que es apatía hacia lo que nos gusta, que andamos de bajón de ánimo y que por eso dejamos de hacer muchos proyectos, otros piensan que son cosas mentales. En conclusión, es una enfermedad que normalmente no se puede medir (al menos hasta ahora lo que se que puede hacer que nos demos cuenta es revisar los síntomas o poro medio de una resonancia magnética en algunos casos). Muchos dicen “es que nada mas te quejas, no tienes ganas de nada, ya no quieres ni salir, todo el día estas acostada, no cargas porque te da flojera, no te animas, de repente tienes unos cambios de animo muy fuertes, tu y tus depres”, en fin, ya no se qué más nos han dicho o cómo puedo generalizar muchos de los comentarios que tenemos a diario por personas que nos conocen poco o mucho pero que en cierta forma están relacionadas en nuestras vidas.
Cuando nos dan masajes, nos podemos relajar y descansamos bastante y nos gustaría que no pararan de hacerlo, aunque muchas veces son más que dolorosos para nosotras (la mayoría de los pacientes con estos padecimientos son mujeres), los cambios de clima nos afectan, a veces nos queremos bañar con agua bastante calientita para relajarnos y otras buscamos lugares fríos para disminuir el dolor. A veces sólo queremos estar recostadas en algún lugar cómodo y que es nuestro lugar preferido porque ahí nos sentimos más o menos bien o menos adoloridas, que decir, una enfermedad bastante silenciosa aunque muy dolorosa, agotante, hartante, desesperante y con muchasA la fecha es complicado definir la fibromialgia en muchos pacientes presiones sociales.
Muchas veces preguntamos y tratamos de encontrar cómo adquirimos esta enfermedad, en muchos libros se habla de que tenemos síntomas desde que somos pequeños, pero no los notamos o no les damos la importancia o los confundimos con alguna otra cosa. A la fecha es complicado definir la fibromialgia en muchos pacientes aunque se tengan los puntos de dolor, porque a veces son extremadamente sensibles y otros días tenemos un poco más de tolerancia o el umbral que tenemos para soportar el dolor se aumenta.
Otras veces nos preguntamos por qué a mi se me manifestó, qué he hecho mal, pero eso nos ayuda a ser más fuertes y continuar contra toda la marea.
A  todos nos ha costado trabajo que las personas puedan entender esa parte de esta enfermedad, el entendimiento de los demás hacia lo que nos ocurre. Muchos todavía no han podido entendernos y otros están muy agobiados por querer ayudarnos, pero paciencia, con documentación, con una explicación, poco a poco irán entendiendo lo que nos ocurre y podrán entendernos.
Si sientes ciertos síntomas como dolor en todo el cuerpo, cambios intempestivos de humor, depresiones continuas, insomnios, cansancio y agotamiento constantes, por mencionar algunas, te recomiendo que consultes con un reumatólogo y/o con un psiquiatra. No estás sola ni loca, hay una causa: la Fibromialgia. Si necesitas platicar conmigo puedes hacerlo cuando gustes y en todo lo que pueda ayudarte lo haré.

Que Dios te bendiga.

Escrito por: Brenda Bastida

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*