Trabajar a distancia para unos ha sido un sueño hecho realidad y para otros ha sido un desencanto, mostrándoles que no es una opción que los haga felices. Esto es parte de lo que reveló una encuesta realizada por Bumeran en México, Ecuador, Argentina, Panamá, Perú y Chile.
Los resultados muestran un cambio en el paradigma referente al trabajo tras la pandemia generada por el Covid-19. La encuesta fue respondida en 51% por personas de entre 41 y 55 años, 22% gente de entre 31 y 40 años y un 13% por individuos de entre 18 y 30 años. Cabe señalar que el 54% de los participantes dijo contar con trabajo actualmente. ¿Podría ser un indicador de las tasas de desempleo en Latinoamérica?
En la encuesta se destacó que en la región el 81% de los encuestados creen que después de la pandemia el trabajo a distancia va a ser incorporado por todas las empresas. Esto manifiesta un cambio en las perspectivas de los trabajadores. Sin embargo, habrá que reaprender algunas técnicas de comunicación y organización de equipo, pues el 60% de los latinoamericanos piensa que en la oficina se generan más posibilidades para hablar de proyectos, objetivos en grupo y generar más ideas.
“Algunas empresas en México ya comenzaban a considerar el home office como un beneficio para sus empleados, pero ante este panorama es probable que llegue a ser parte de las prestaciones. En Bumeran estamos convencidos de que cambiar nos permite adaptarnos al ambiente y aprovechar mejor las oportunidades”, señala Agustín Iglesias, Country Manager de Grupo Navent México.
Home office de avanzada
A pesar de que el trabajo a distancia irrumpió en el escenario laboral mundial con fuerza, a nivel Latinoamérica sólo el 28% de quienes respondieron la encuesta a finales de mayo dijeron estar realizándolo. Resalta que en México y Perú el 40% de los encuestados dijeron estar trabajando aún bajo esta modalidad. En la región el país que destacó por tener la tasa más baja de trabajadores home office fue Panamá con sólo un 13%.
El trabajo a distancia, como toda nueva modalidad requiere de ciertas disposiciones. Por ello, el 38% de los latinoamericanos considera que sería necesario contar con equipamiento necesario para trabajar de forma cómoda en el hogar (silla ergonómica, soporte de computadora, cámara web, entre otras); 32% consideran necesario la digitalización de documentos (reportes y archivos importantes), el 29% asesoramiento para incorporar mejores prácticas y el 22% lineamientos para reaccionar de manera rápida ante una situación que requiera presencia física.
Entre los resultados que se presentaron, se descubrió que el 70% de las compañías latinoamericanas no contaba con el beneficio de home office para sus empleados antes de la pandemia. De los seis países entrevistados, destacó que en México es donde estamos más avanzados (38%) en la incorporación de este esquema laboral.
Pros del home office
- El 62% de los encuestados creen que son más productivos trabajando desde su hogar.
- El 56% señaló que valora el ahorro de tiempo en el camino desde y hacia el trabajo.
- El 16% disfruta poder trabajar en compañía de sus seres queridos y compartir con ellos más tiempo del habitual
- El 9% cree que está más tranquilo en su casa que en la oficina.
- Un 9% se concentra mejor en casa.
Contras del home office
- El 60% de los latinoamericanos considera que en la oficina se generan más posibilidades de hablar de proyectos u objetivos en grupo y generar más ideas.
- El 23% dice extrañar a sus compañeros de oficina.
- El 33% dicen que el principal contra que observan es trabajar fuera del horario habitual y más horas que antes.
- Al 16% le cuesta desconectarse y poner límites entre su vida personal y profesional.
- A un 12% le falta equipamiento para trabajar de forma saludable.
- El 9% dice que no se toma los mismos descansos que estando en oficina.
- Un 8% siente que hay falta de comunicación en el equipo y eso le impide realizar bien su trabajo.
- El 6% señala no contar con apoyo constante de parte de su líder.
El aprendizaje de esta encuesta es que las áreas de RRHH y los jefes de equipos tendrán que mejorar sus técnicas de comunicación y trabajo en común ante lo que se prevé como una nueva tendencia en el mundo laboral.