A la hora de bajar de peso, a menudo caemos en errores que interfieren o nos desaniman de seguir nuestra meta. Dos errores principales son: querer que lo que funcionó a “la amiga de la prima” nos resulte igual y la necesidad imperiosa de ver resultados rápidamente. ¿Por qué señalar estos errores? Porque lo que más nos frustra es no ver los resultados deseados y esto nos puede desmotivar, haciéndonos desistir de nuestro objetivo.
Bajar de peso es un proceso. Toma tiempo, esfuerzo y nunca es igual para nadie. Cada organismo es diferente y es fundamental entender esto. Hay máquinas de ejercicio que prometen llevarnos a nuestro peso, dietas que aseguran resultados casi milagrosos y cientos de opciones en el mercado para ayudarnos en nuestro trayecto hacia el peso ideal. Sin embargo, no todos funcionan igual para cada persona. Es importante aprender a conocernos y encontrar lo que tiene mejores resultados para nosotros.
Hay muchos factores que intervienen en el control del peso, no se trata de “cerrar la boca”. Nuestro organismo necesita nutrientes y la suficiente cantidad de energía para realizar sus actividades diarias. Nuestra altura, complexión, el metabolismo, así como nuestro estilo de vida e incluso los aspectos psicológicos detrás de nuestra alimentación, serán factores a considerar para hallar el mejor método para perder peso.
El ritmo de pérdida también será diferente para cada organismo. Existen metabolismos rápidos y lentos, hay dietas que funcionan mejor para unos que para otros. La velocidad de los resultados dependerá, en parte de que le ayudemos a nuestro cuerpo haciendo ejercicio y en parte, del funcionamiento particular de nuestro organismo.
Es un poco como un proceso de prueba y error, aprender a conocer qué es lo que nuestro cuerpo necesita y cómo funciona mejor. Así como aprender a tener una relación más sana con la comida y asegurarnos de que no estamos proyectando en ella problemas emocionales.
Es por esto que contar con la ayuda de especialistas puede ser tan beneficioso para lograr nuestro peso. No se trata de dietas estándar, sino de métodos que basados en la información personal, nos ayudan a encontrar una estrategia acorde a las necesidades únicas y personales, para lograr mejores resultados.
Escrito por: Elena Pedrozo
