Hay cientos si no es que miles de programas para bajar de peso en la actualidad. Sin embargo, ninguno de ellos es efectivo para toda la gente. Hay quienes ven resultados con facilidad y quienes no. Para obtener los mejores resultados, es necesario elegir el programa más adecuado a tus necesidades y características.
Al reducir tus opciones, debes ser honesta contigo misma. Aquí algunas preguntas que debes hacerte antes de decidirte.
¿Se ajusta a tu día a día? Evalúa el plan. ¿Es algo que puedes seguir mientras estás en el trabajo y es compatible con los demás aspectos de su vida diaria? ¿Cómo encaja tu familia en la ecuación?
¿Cuáles son los costos? Si el programa consiste en cocinar tus propias comidas, ¿se pueden encontrar fácilmente los ingredientes en las tiendas locales? Si vas a trabajar con un entrenador personal, ¿podrás pagar horas de clase o asistir a un gimnasio?
¿Suena demasiado bueno para ser verdad? Algunos planes hacen promesas extravagantes, asegurándote que podrás bajar de peso con ningún esfuerzo. No te confíes e infórmate bien.
¿Qué tipo de apoyo está disponible? La mayoría de nosotros se siente mejor cuando nos rodeamos de personas con ideas afines y objetivos similares. Si trabajas mejor en grupo, elige los programas que ofrecen asistencia en línea, foros, una comunidad de los miembros, reuniones locales, etc.
¿Es seguro? Este es un aspecto que suele pasarse por alto, aunque imprescindible para tu salud. Si el programa que estás considerando contiene píldoras, líquidos o cremas, lleva una lista de los ingredientes a tu médico. Asegúrate de que no haya riesgo de efectos secundarios negativos. Si tienes alguna condición médica preexistente, siempre debes hablar con tu médico antes de comenzar cualquier dieta o plan de ejercicios.
Los programas para bajar de peso no funcionan en una semana. Debes elegir una estrategia que puedas seguir a largo plazo.
Escrito por: Angie Nelson