Escrito por: Carlos Segura
¿Te has puesto a pensar qué es lo que necesitas para sentirte bien? ¿Qué es lo que requieres para estar satisfecha con un resultado específico?
Si evaluaras tu grado de satisfacción personal, ¿en qué nivel del 0 al 10 te encuentras?
Si estás cerca del 10, te felicito. Si estás debajo considera lo siguiente.
El ser felices, el sentirnos satisfechos depende totalmente de nosotros mismos.
¿Quién es más feliz, el ejecutivo exitoso con dinero, propiedades, autos, familia bonita o el empleado con esposa y 3 hijos, sueldo modesto, casa rentada, sin auto?
La respuesta es: Depende: los dos, el rico, el pobre o ninguno. ¿De qué depende?
De los parámetros que tenemos para medir la satisfacción o la felicidad.
Si tus parámetros son muy altos o, aún más importante, no dependen de ti, seguramente no estarás feliz. Si tus parámetros son retadores pero alcanzables y dependen enteramente de ti te encontrarás satisfecho, motivado y feliz.
Te propongo el siguiente ejercicio:
1. Escoge un tema: Tu trabajo, tu casa, el amor, tu rol de madre… (Supongamos que escogiste el tema del trabajo)
2. De ese tema, escribeEl objetivo es que no te compliques la existencia, el reto es que construyas tus objetivos de vida tomando responsabilidad sobre los mismos qué necesitas para estar satisfecha. Sé detallada. (Por ejemplo, que esté cerca de mi casa, que me paguen muy bien, que me reporten más de 5 personas, que mi jefe sea educado y considerado, etc.)
3. Ahora, de esa lista marca las características que dependen de ti y aquéllas sobre las que no tienes ningún control. (Pregúntate objetivamente, ¿depende de mí que mi jefe sea educado y considerado?)
4. De lo que resultó que sí depende de ti, describe qué tienes que hacer para que se dé. Si resulta demasiado complicado, entonces NO depende de ti. (Por ejemplo, que esté cerca de mi casa. ¿Hay alguna empresa cerca de tu casa?, ¿Se dedica a lo que tú sabes hacer?, ¿Cumpliría ese trabajo con las otras condiciones?)
5. Lo que resulte que sí depende de ti y es factible, haz el plan detallado. (Para que me suban el sueldo tengo que: cumplir mis objetivos al 100%, ser creativa, trabajar proactivamente en los equipos, etc.)
6. Lo que resulte que no depende de ti, descártalo o cámbialo por algo que sí dependa de ti. (Si mi jefe es un mal educado, ¿qué tengo que hacer yo para darme a respetar? O, ¿qué pasaría si trato de entender el temperamento de mi jefe y me adapto al mismo para complacerlo?)
El objetivo es que no te compliques la existencia, el reto es que construyas tus objetivos de vida tomando responsabilidad sobre los mismos.
De esta manera, si no logras algo, no tendrás necesidad de culpar a un tercero. Por el contrario, tendrás la oportunidad de enmendarlo por ti misma, hacer las cosas a tu manera y lograr la satisfacción total.
Si tienes un problema y éste tiene solución, pues arréglalo, si éste no tiene solución o no depende de ti, cambia tu perspectiva del mismo y que no sea más un problema.
Por ejemplo, si el tráfico de tu oficina a tu casa te resulta insoportable y siempre ha sido un problema para ti, analízalo. ¿Es algo que tú puedas solucionar? No, ¿verdad? Entonces, cambia tu perspectiva del mismo. Piensa, ¿en qué puedo aprovechar este tiempo que me encuentro en mi coche? Puedo escuchar mi música preferida, una estación de radio divertida, puedo ir platicando conmigo misma, o mejor aún, puedo comprarme un audio libro.
Imagínate escuchando un audio libro y que estés tan “picada” que no te quieras bajar del coche hasta que hayas terminado de escuchar el capítulo. ¡Hasta vas a desear que tarden más los semáforos! Eso es cambiar la perspectiva a los problemas.
Haz el ejercicio, evalúa tus parámetros para ser feliz y cuéntame cómo te fue.
Escrito por: Carlos Segura
Coach Ejecutivo
