Ser mujer es algo maravilloso. Hay características que nos hacen únicas y potenciales que tenemos y debemos explotar. Sin embargo, muchas veces dichos potenciales se ven apocados por el simple hecho de ser “mujer”
¿No es eso algo contradictorio? Cómo puedes demostrarle al mundo lo mucho que vale tu trabajo, tu tiempo, tu esfuerzo, tu amor, si constantemente debemos luchar el doble o hasta el triple para llegar a tener lo que a un hombre casi no le cuesta. Y no estoy diciendo que a los hombres todo les venga fácil, pero definitivamente hay una ventaja contundente entre ambos sexos.
Estadísticamente, las mujeres reciben alrededor del 77% del salario que un hombre gana estando en el mismo puesto. Los despidos injustificados son mayores cuando se habla de mujeres, y la contratación se vuelve más difícil cuando la mujer planea o tiene hijos.
Vivimos en una sociedad regida por hombres que creen que las mujeres no podemos hacer lo mismo que ellos, cuando la verdad es que científicamente las mujeres estamos más capacitadas en muchísimos sentidos.
No trato de implementar una conciencia completamente feminista, sino invitar a todas esas mujeres que se han sentido agredidas por la sociedad, a que alcen la voz, debemos demostrarle a los hombres y principalmente a nosotras mismas de lo que somos capaces; alcanzar puestos importantes, tener premios y logros para que la sociedad comience a darse cuenta que si bien, somos diferentes en cuestiones fisiológicas, no es así en cuestiones de rendimiento y mentales.
Démonos una oportunidad como mujeres, para brillar en este mundo que nos quiere tener en la sombra. Salgamos y gritemos lo mucho que vale cada una de nuestras palabras, acciones, pensamientos, órdenes. ¿Qué dices? ¿Seguirás siendo una estadística más? ¡Actúa mujer!
Escrito por: Kary Santana