Bienestar

Tips para una meditación completa

medita 

 

Conoce los tipos de meditación y las sugerencias para que empieces a vivir plena en tu entorno

Hay tres tipos de meditación: activa, pasiva y en movimiento. Veamos para qué sirve cada una.

Meditación activa – En este tipo de meditación, se utiliza la imaginación creativa, que  te permite visualizar y expulsar de tu Ser y vida las emociones y pensamientos negativos, además de crear: salud, relaciones armoniosas, solución de problemas y mejorar tu productividad, así como lograr tus proyectos para tu superación personal y profesional, además te proporciona una concentración profunda, que te llevará a un estado de calma y paz interior, por medio de la cual puedes hacer reprogramaciones de tu subconsciente.

Meditación pasiva – Se realiza lo opuesto a la activa. Aquí no se trata de atender a ningún pensamiento ni emoción. Con este tipo de meditación florece tu verdadero Ser y tu conciencia espiritual.

Meditación en movimiento Al estar haciendo ciertas actividades, podrías meditar. El movimiento tomado como una meditación se encuentra en la tradición sufí y en la taoísta, es un sendero hacia la calma interior. es un movimiento centrado, en el presente. Esta meditación permite el control y manejo de tu energía, así los movimientos corporales te llevan a un nivel de paz y armonía, que nos permitirá equilibrar las emociones y los pensamientos.

Sugerencias para la persona que medita:

Autodisciplina – Sin ella no habrá avances en tu meditación.

Paciencia y constancia – Debes trabajar paso a paso y sin prisa dentro de tu propio desarrollo y ser consciente de que los resultados no se darán al día siguiente, sino después de todo un proceso disciplinado.

Humildad –Ser humilde en tu avance y así reconoceràs que siempre hay cosas nuevas que aprender, sin la necesidad de ir divulgando a todo el mundo tus experiencias y conocimientos para sentirte superior a los demás.

Independencia – Implica seguir y escuchar tu voz interior.

La postura es importante que sea cómoda, sentado en el piso, o en una colchoneta, o en un banquito, o bien en una silla; la espalda  debe  mantenerse erguida, pero sin estar rígida; las manos pueden descansar sobre los muslos, con las palmas hacia arriba relajadas, o la mano derecha sobre la palma izquierda, con las yemas de los dedos pulgares tocándose ligeramente; o bien tocándose ligeramente las puntas de los dedos pulgar e índice; la meditación es para disfrutarse, no para sufrir y estar incómodos. El objetivo es llegar al estado alfa. Por lo que la postura ideal es aquella en la que puedas mantenerte cómodamente, sin tener que cambiarla durante tu meditación.

Obstáculos en la meditación:

Desaliento – No te desalientes si no alcanzas los resultados  esperados en tu meditación y no la  abandones.

Soberbia espiritual – No te sientas “el salvador de la raza humana” y único conocedor de la verdad. No te sientas superior y merecedor del mayor respeto. Con esto colocas un muro entre tú y tu fuente espiritual.

Fanatismo – Se da cuando tratas de convencer a la gente, por cualquier medio, de que lo que tu practicas es lo único válido.

Escepticismo – Es una barrera que no te permite disfrutar de los beneficios de la meditación.

Es conveniente suspender la meditación:

Si sientes un temor inexplicable.
Si surgen sentimientos depresivos, de angustia o rencor.
Si aparecen imágenes desagradables.
Si sientes una energía que te oprime.
En todos estos casos es preferible dar por terminada tu meditación, abriendo suavemente tus ojos.

Escrito por: Carlos Margain
Instructor de yoga y meditación - 5543 0292/5543 4158

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

*